Tenerife recibió 5.927.515 turistas en 2017. Es decir, una isla de 2.034 kilómetros cuadrados registró más visitas que muchos países de referencia como República Dominicana, Túnez o Argentina.

Unas cifras mareantes que hemos querido analizar durante Fitur 2018 con Alberto Bernabé, consejero de Turismo y vicepresidente del Cabildo de Tenerife. gastronomía, lujo, disputas en la promoción turística y estrategias de futuro también han tenido protagonismo en la conversación.

Pregunta (P): Los grandes municipios turísticos de Canarias se han presentado por separado a Fitur, ¿cómo se afronta teniendo en cuenta que son los que reciben mayor número de turistas?

Respuesta (R): Hay un punto un poco contradictorio, porque los municipios que han seguido esta estrategia han dicho que esto no pone en duda la unidad promocional del Archipiélago, que ellos lo que han montado es un lobby para defender mejor los intereses de los municipios turísticos. Pero hay un punto que no se entiende muy bien: si lo que quieren es crear un lobby para defender sus intereses y lograr más financiación –que me parece lícito,- la estrategia se debe desarrollar durante todos los días del año en los despachos o tratando con los organismos competentes, pero no en Fitur, que es una feria promocional. Choca porque ellos sí están de acuerdo con la promoción exterior de Tenerife y Canarias. Montar un stand separado en Fitur lo que ha generado es mucha confusión.

P: ¿Existen conversaciones con el Cabildo?

R: Ni la Asociación de Municipios Turísticos de Canarias ni los ayuntamientos nos han contado qué fines persiguen y ni siquiera somos conscientes sobre en qué aspectos de la estrategia turística de la isla, que está escrita, están en desacuerdo. Este documento se ha redactado durante los últimos 10 años, se trabajó con los empresarios, con los ayuntamientos y con todos los agentes turísticos de la Isla. Se presentó un documento de 200 folios hace menos de un año y yo no conozco con qué página no están de acuerdo, porque realmente creo que están de a favor de la estrategia turística de Tenerife. Hay algo ahí que resulta difícil de entender y yo creo que les corresponde a ellos explicarlo bien.

P: ¿Con esta decisión, ¿pierde fuerza la marca Tenerife, la marca Islas Canarias?

R: Siempre hemos dicho que en materia turística la unidad es muy importante, de hecho, yo creo que Tenerife es la isla que mejor entendió que es importante hacer política turística y no política con el turismo. Yo creo que los ayuntamientos han utilizado esta iniciativa como una estrategia política y desde el Cabildo les invitamos a que defiendan sus intereses y que también cuenten con nosotros para ello. Vamos a seguir con la política de mano tendida y les seguiremos invitando y haciendo copartícipes de absolutamente todo. Ignoramos lo que han hecho en este stand y creo que no es bueno para el futuro porque Tenerife es la suma de muchas cosas y muchas de ellas ocurren en los municipios turísticos, pero lo que ocurre fuera de ellos es igual o más importante, porque somos isla turística y la estrategia tiene que ser insular.

P: Se baten los récords, pero ¿en qué se puede mejorar como destino?

R: Se puede mejorar mucho. Entre crecer un 10% en el número de turistas o aumentar un 10% la satisfacción y el gasto que hace el turista en destino, yo elegiría lo segundo. Tenemos una tendencia, que no siempre es buena, a fijarnos demasiado en las cifras y los récords de turistas entrados, pero lo importante es la ecuación entre el número de turistas y lo que esos turistas generan al destino en todos los sentidos: los residuos que generan o la carga sobre los espacios naturales, pero también el gasto y cómo lo hacen. No es lo mismo que el turista sólo gaste en el hotel ‘todo incluido’ que lo haga moviéndose por la isla, y yo creo que en esta senda podemos mejorar.

P: Llevamos tiempo anunciando que “vienen los cocos”, ¿qué tienen que les diferencie de los destinos competidores del Mediterráneo?

R: Tenerife al igual que Turquía, aunque esta no todo el año, ofrecen un gran clima. Ambas contamos con una gran infraestructura hotelera e incluso en este punto ganarían los turcos porque en muchos meses ofrece una calidad alojativa similar pero mucho más barata y esto pesa mucho en la industria turística. Pero nosotros creemos que nuestro valor es la diversidad accesible, es decir, aspiramos a clientes que quieran disfrutar de un destino, no de un hotel; y en este sentido yo creo que el producto que ofrece Tenerife es imbatible y está a años luz del que pueden ofrecer Egipto, Túnez o Turquía.

P: ¿Es suficiente como para imponerse a los precios más bajos?

R: Somos más caros porque creo que valemos más, porque tenemos una oferta y una diversidad a la que se puede llegar, por eso digo accesible. Somos una isla pequeña pero llena de contrastes que se pueden observar alquilando un coche o en transporte público. En otros mercados competidores pueden tener esa diversidad pero por diferentes motivos como tamaño, seguridad, infraestructuras, costes o servicios no está preparada para ser enseñada y el cliente se restringe al ámbito del hotel. La diferencia entre estar encerrado en un resort durante una semana y disfrutar de un hotel que se llama isla es abismal y por ella vale la pena pagar el doble, porque creemos que vale el triple. Esa es la diferencia competitiva que tenemos.

Alberto Bernabé, consejero de Turismo del Cabildo de Tenerife con Amor Alonso, Tourinews

P: El número de hoteles de lujo ha crecido en los últimos años, ¿a qué responde esta tendencia? ¿Qué supone?

R: Hay un poco de todo, pero yo creo que todos hemos entendido que la isla gana más orientándose hacia la parte alta de la tabla que en la parte media. Antes estábamos en la parte media con un producto de cuatro estrellas y poco a poco hemos visto como los hoteles de cinco estrellas consumen menos camas, generan un turista de más poder adquisitivo y, además, son más intensivos en empleo. Un hotel de cuatro estrellas de 200 habitaciones tiene muchos menos empleados que uno de cinco estrellas con las mismas habitaciones.

También mejora mucho la imagen. Hace 15 años en Reino Unido la imagen que se tenía de la isla no tenía nada que ver con un producto de lujo, tanto es así que para hoteles como el Abama Resort era contraproducente utilizar en su marketing la palabra Tenerife. Ahora, para la mayoría de los consumidores europeos, la isla es una opción de lujo. No somos un destino de lujo, ya que supone un 15%, pero somos una referencia en ese segmento. Esto ha atraído a un turista de mayor poder adquisitivo que demanda más gastronomía, mejor ocio, más servicios y, por lo tanto, tira de la demanda turística y de la isla en su conjunto.

P: La apuesta por el lujo también se ha visto acompañado por una apuesta por la alta gastronomía

R: Se ha generado, por decirlo así, un upgrade, un lifting de la imagen que tiene de nosotros en el exterior y que hemos tratado de asociar a productos de excelencia. La gastronomía me gusta ponerla como ejemplo. ¿Por qué las seis estrellas Michelin que hay en Canarias están en Tenerife? ¿Porque nos tocó la lotería o porque tenemos mucha suerte? ¿Por casualidad? No. Porque los hoteles apostaron por ese segmento y es más fácil que apueste un hotel de cinco estrellas por ese segmento. Son sólo seis restaurantes de los 3.000 que hay, pero tanto los restaurantes como la propia gala Michelin, que decidimos albergar en 2017, generan centenares y centenares de artículos y menciones en los medios y eso es vender Tenerife. Estamos utilizando un microporcentaje de la gastronomía del lugar, pero eso beneficia a todos porque se produce un efecto contagio haciendo que se mejore en todos los sectores y al final se observa como la calidad media ha subido: hay mejores tiendas, mejores restaurantes, empresas dedicadas a servicios exclusivos y al final eso tira para arriba de toda la economía.

P: ¿Con qué se marcha su delegación de esta edición de Fitur? 

R: Yo creo que hemos consolidado la credibilidad que siempre hemos tenido en el mercado nacional, donde somos la isla número uno. También hemos comprobado con la touroperación y las líneas aéreas tienen muy claro que Tenerife es un producto muy competitivo. Asimismo hemos comprobado que aunque ya vienen los “cocos” y hay destinos maravillosos que se mueven y son competitivos, Tenerife demuestra una vez más tener una gran solidez turística frente a ellos.

P: Con la llegada de Air Europa hay más vuelos entre islas, Iberia también ha llegado a acuerdos con Binter, ¿puede servir para redistribuir la capacidad o no tendrá ningún impacto en el turismo internacional?

R: No sé si llegará a redistribuir capacidad. Aunque es verdad que algunas veces se ha explorado lo del turismo en varias islas, también es cierto que a los europeos no les afectan los descuentos, por lo que se genera más competitividad para el turismo multi-islas, que por ahora no cuaja.

Yo creo que el objetivo que tuvo y tiene Air Europa es captar el millón de viajes más que el incremento del descuento a residentes va a generar y que todo apunta a que se está cumpliendo porque los canarios estamos viajando más que nunca porque es más barato que nunca. Yo creo que hay una gran oportunidad para los hoteles, apartamentos y residencias de toda Canarias, porque pueden captar de una manera muy cercana a un cliente que siempre va a estar ahí, que es el canario.

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