Las Kellys —camareras de piso o personal de limpieza de hoteles— de Benidorm (Alicante) vuelven, un verano más, a salir a la calle para denunciar la sobrecarga de trabajo que experimentan durante las temporadas altas. Según los cálculos del colectivo, son 4.000 trabajadoras en un municipio que registra 16 millones de pernoctaciones hoteleras al año.
“Un verano más de sobrecarga laboral, situaciones que no cambian, a finales de verano saldrán estadísticas de Bigdata de éxito en ocupación, pero detrás hay cifras demoledoras, la carga de trabajo atenta contra el derecho a la salud de las Kellys”, ha denunciado el colectivo a través de su cuenta de Facebook.
Tras dos años de pandemia, los destinos españoles están batiendo récords con respecto a llegada de turistas y de ocupación. No obstante, denuncian las camareras de piso, la recuperación económica no se está teniendo ningún impacto en su trabajo. De hecho, desde el colectivo aseguran que ya hay compañeras que han solicitado la baja médica debido a la sobrecarga de trabajo.
A pesar de que se ha tratado de poner fin o límites a la sobrecarga de trabajo que sufren las camareras de piso, las Kellys de Benidorm aseguran que no se están cumpliendo. “Se incumplen leyes de prevención, los planes, los convenios, pero parece que es lo que toca en una ciudad que vive del turismo”, insisten las trabajadoras.
