La Asociación de Viviendas Turísticas de Andalucía (AVVA) ha interpuesto un recurso contencioso-administrativo contra la modificación de la tasa por la recogida de basuras de actividades económicas -aprobada por el Pleno del Ayuntamiento de Málaga el pasado 27 de septiembre-, al considerar que aumenta la carga impositiva a las viviendas de uso turístico, que ya tributan por el concepto de basuras mediante el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).
La organización ha explicado, por medio de un comunicado, que ha recurrido el acuerdo del Consistorio malagueño por incluir a los pisos de uso turístico en la modificación de la citada ordenanza, cuando en realidad estas viviendas no se encuentran en la calificación de ‘actividad económica’, sino en la de ‘finalidad residencial’, lo que entienden como un agravio y vulneración de derechos para sus propietarios.
La AVVA ha destacado, entre sus alegaciones jurídicas, que el acuerdo del Ayuntamiento de Málaga produce un quebrantamiento de los principios de seguridad jurídica, capacidad, proporcionalidad e igualdad en la actuación administrativa. También, que no queda justificado, en el informe económico-financiero municipal, que el importe de la tasa modificada se corresponda con el coste real de los servicios en viviendas de uso turístico, que "no generan más volumen de basuras y residuos sólidos que cualquier vivienda de uso propio".
Málaga
Al mismo tiempo, la asociación ha lamentado haber tenido que recurrir a la vía judicial para proteger los derechos de aquellos que han decidido alquilar sus viviendas con fines turísticos y de forma legítima. “No nos ha quedado más opción que acudir a la Justicia ante una iniciativa de mero afán recaudatorio y no ajustada a Derecho, ya que califica como actividad económica a las viviendas turísticas cuando no lo son, como ya han sentenciado varios tribunales de Justicia”, declaró al respecto el presidente de AVVA, Carlos Pérez-Lanzac.
“Desde la asociación tendemos la mano al Ayuntamiento para que, como nos hubiera gustado en este caso, las medidas que se adopten cuenten con el sector y así contribuir de forma consensuada a dotar de seguridad jurídica, de estabilidad normativa y garantías de calidad de servicio, no sólo a los cientos de propietarios de viviendas turísticas que hay en Málaga, sino también a sus usuarios”.
Lo cierto, es que el Ayuntamiento de Málaga tenía previsto recaudar, con la modificación de la tasa de basura, 316.000 euros. En la actualidad, están registrados 3.000 pisos de fines turísticos en la ciudad andaluza, con más de 14.000 plazas. Aquellos que dispongan de una a cuatro plazas tendrán que abonar 63,9 euros anuales bajo este concepto; los que tengan de cinco a ocho 127,8 euros; los de nueve a doce 191,7 euros; y los de más de doce plazas 255,6 euros.
