La presidenta del Govern de Islas Baleares, Marga Prohens, ha adelantado alguna de las medidas “valientes” que prometió cara a la próxima temporada para combatir la saturación turística. Durante su intervención en el segundo día de debate de política general en el Parlament, la presidenta ha anunciado un incremento del Impuesto Turístico, o lo que es lo mismo, la subida de la ecotasa a la que tanto se había negado con anterioridad. Este aumento repercutirá en los turistas alojados en hoteles durante los meses de temporada alta (junio, julio y agosto).

La medida, incluida en el Decreto de medidas contra la congestión, contempla también la rebaja del impuesto en los meses de diciembre, enero y febrero, con el objetivo de desestacionalizar la llegada de turistas. El objetivo es regular los flujos turísticos mediante esta herramienta.

No obstante, Prohens ha comunicado que tratará de eximir a los residentes del pago de dicho impuesto, mediante su desgravación en la declaración de la renta.

Asimismo, la presidenta ha anunciado el fin de una moratoria y el comienzo de otra. Por un lado, el Govern levantará la denominada moratoria turística —que sigue en vigor a la espera que los consells insulars fijen los techos de sus bolsas de plazas— y, por otro, ya no se concederán nuevas plazas de alojamiento turístico en edificios plurifamiliares en Baleares. En este sentido, Prohens ha aclarado que se garantizará la continuidad de las plazas regladas existentes de alquiler turístico, tanto en plurifamiliares como en unifamiliares en todas las islas.

Los hoteleros, “indignados”
 

La reacción de los hoteleros no se ha hecho esperar. A través de un comunicado, la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) ha mostrado su “indignación y decepción por la falta de valentía del Govern balear”. La vicepresidenta de la asociación, María José Aguiló, ha asegurado que, con las medidas anunciadas, el Govern actúa “con medias tintas”, ya que “en lugar de focalizarse hacia la oferta ilegal se penaliza la oferta reglada ignorando a los casi 3 millones de visitantes que se librarán de pagar el ITS”.