200 asociaciones y empresas se han unido para reclamar de forma urgente que se lleve a cabo la ampliación del Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona –El Prat. Este movimiento empresarial nace después de que el Ayuntamiento de Barcelona se haya opuesto a las obras previstas por Aena para antes de 2026.

El movimiento, impulsado por Foment de Treball —la principal patronal catalana— ha sumado en sus filas a Pimec, el Cercle d'Economia, la Cámara de Comercio de Barcelona, Barcelona Tech City, Mobile World Capital, el Círculo Ecuestre, el RACC, Esade , UFECUPMBarcelona Global, Barcelona Oberta y el Gremi de Restauradors, entre otras.

“Inaplazable e imprescindible”

El próximo miércoles 2 de junio tendrá lugar en el campus de la ESADE Business & Law School un acto reivindicativo en el que se reclamará una ampliación que consideran “inaplazable” e “imprescindible”. En un manifiesto que han hecho público recalcan que la ampliación del Aeropuerto de El Prat supondría no solo la consolidación del destino turístico, sino una mayor generación de “empleo, atracción y retención de talento e inversión internacional".
 


Piden que haya diálogo y se llegue a soluciones entre las administraciones competentes y empresas competentes —Aena, la Generalitat de Cataluña, el Área Metropolitana de Barcelona y los Ayuntamientos de Barcelona, el Prat, Gavà, Viladecans, Sant Boi y el resto de municipios afectados—, con tal de “enviar a las instituciones europeas un mensaje claro y contundente de consenso en relación con el interés público que justifica la ampliación, y a las medidas de compensación medioambiental que hay que adoptar; para facilitar su ejecución”.



Al límite de su capacidad

El proyecto, que supone unir los aeropuertos de El Prat y Girona a través de una terminal satélite y alargar una de las pistas —con una inversión prevista entre 1.500 y 1.700 millones—. Desde el punto de vista de los organizadores, esta es una inversión a la que “no se puede renunciar”, ya que consideran que el aeropuerto es clave para contribuir “a la recuperación económica de Cataluña y a su crecimiento”. De hecho, El Prat aporta el 7% del Producto Interior Bruto (PIB) y con las obras de mejora podría alcanzar hasta el 9%, según cifran los convocantes de este acto reivindicativo.

Advierten de que, antes de que estallase la pandemia, el aeropuerto estaba al límite. “Con su actual diseño y configuración está agotando su capacidad. La cifra de cerca de 53 millones de viajeros registrados en 2019 se acercó a su capacidad máxima de 55 millones”, recalcan.

Añaden de nuevo que  "el coste de oportunidad y de imagen de no llevar a cabo esta inversión sería altísimo para la economía de Cataluña”.
 

El proyecto, que supone unir los aeropuertos de El Prat y Girona a través de una terminal satélite y alargar una de las pistas"

"El proyecto, que supone unir los aeropuertos de El Prat y Girona a través de una terminal satélite y alargar una de las pistas"

Responsabilidad ambiental y desarrollo de otros polos

Asimismo, también piden por parte del gestor aeroportuario Aena a que se comprometa a compensar el impacto que la ampliación tenga en los espacios naturales. Le solicitan, además, la creación de “un nuevo espacio natural del Delta del Llobregat con una ampliación de la superficie protegida superior al 25% actual".

Por su parte, defienden que el crecimiento del Aeropuerto de Barcelona-El Prat es compatible con el desarrollo del Puerto de Barcelona —“ambas infraestructuras son relevantes”— y piden que, además de la complementaria a Barcelona, se mantenga a futuro la actividad propia en los aeródromos de Girona-Costa Brava (Girona) y Reus (Tarragona).