Desde que en noviembre de 2018 se aprobó la reforma del Estatuto de Autonomía de Canarias, desde el Archipiélago se ha reclamado el cumplimiento de uno de los aspectos acordados en el mismo: que el Estado transfiera las competencias de Costas al Gobierno de Canarias. Si se completa la cesión, el ejecutivo autonómico tendrá autogobierno en la ordenación y gestión de los más de 1.500 kilómetros de su litoral, con plenas competencias en lo que se refiere a construcción, asignación de playas o la licitación para la concesión de servicios.

Se trata de una reivindicación que se lleva esgrimiendo por mucho tiempo por parte del sector político y económico canario y que, tras mucho tiempo parece cercana. En su comparecencia este martes 23 de noviembre en el Parlamento de Canarias, el presidente del gobierno regional, Ángel Víctor Torres, manifestó su confianza en que la cesión tenga lugar a partir del mes de enero. No obstante, sobrevuela la duda de si se podrá cumplir el plazo —como ya ocurrió con el marcado para junio de este año— y de si se pactarán las condiciones adecuadas desde el punto de vista de los canarios.

Y es que tal y como confirmó su presidente en su intervención, tras numerosas reuniones con el Ministerio de Política Territorial y el de Transición Ecológica el Estado se resiste a ceder competencias en lo que respecta a planeamiento y sanciones. “Tenemos algunas discrepancias con el Estado respecto a la capacidad sancionadora, hasta dónde llegan los límites de una administración u otra con respecto a la capacidad sancionadora. Y, por otro lado, algunas diferencias con respecto al planeamiento”, admitió.
 

Torres se muestra convencido de que esto se salvará en una próxima comisión de carácter técnico antes de que acabe este año y recalcó que hay competencias, como es el caso de las de Costas, que “no cabe que sean transferidas de cualquier modo”. “Es el momento de trasladar con claridad que entendemos que ya es el límite para poder conseguir esas transferencias. En el mes de enero, las transferencias de Costas deben llegar”, apostilló.
 

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