La sorpresa ha saltado en Tenerife en esta primera quincena de agosto ya que la Dirección General de Costas ha clausurado chiringuitos, kioscos y escuelas de surf de las playas de los municipios de Arona y Adeje, los dos principales destinos turísticos de la isla. La entidad pide que se regularice la situación de este tipo de establecimientos, exigiendo que su adjudicación se produzca mediante concurso público y no mediante contrato de temporada, como se venía haciendo hasta ahora.

Carlos Alonso, presidente del gobierno insular, valora para Tourinews qué supone este cierre para el destino y sopesa las mejores soluciones para incrementar la calidad de los servicios costeros de un destino turístico en el que “Dirección General de Costas ha invertido muy poco en los últimos años”.

Pregunta (P): ¿Qué supone el precinto en mitad de agosto de algunos servicios de playa como chiringuitos o escuelas de surf en los dos principales municipios turísticos de Tenerife?

Respuesta (R): Creo que es bastante negativa esta suspensión de la actividad o por lo menos la manera en la que se ha hecho. Nuestra temporada alta turística es en invierno, pero en verano la afluencia es muy alta, sobre todo del mercado peninsular y local, que además es el que más tradicionalmente hace uso de este tipo de actividades y establecimientos. Aparte, no sólo están afectados los chiringuitos vinculados al ocio, sino también lo están las actividades formativas para niños, para surf, que ahora en verano es el período más importante.

P: ¿Esto estaba preparado? ¿Se esperaba?

R: Nosotros la primera noticia que tenemos es a través de los medios de comunicación. Si la actividad no está bien regulada, porque se ha venido prestando de manera alegal a través de permisos de temporada en vez de a través de regímenes de concesión licitados mediante concurso, tanto Costas como los ayuntamientos de Arona y Adeje se tendrían que haber puesto de acuerdo para ordenar este asunto sin provocar de manera brusca el cese de la actividad. Al final el daño es para los empresarios desde el punto de vista económico, pero sobre todo es para el usuario y para la imagen turística de la isla.

P: ¿Hay una solución provisional?

R: Entiendo que si se ha decretado el cierre por parte Costas, no veo que haya otra solución diferente a mantener ese cierre. Además, agosto desde el punto de vista administrativo es complicado, muchas vacaciones. Entonces yo veo complicado incluso por la vía judicial que los empresarios puedan actuar en el mes de agosto. A nosotros no nos han pedido que mediemos ni nada. Ni Costas ni los ayuntamientos se han dirigido a nosotros.

P: ¿Se llegará a tiempo a la temporada alta (octubre-abril)?

R: Los dos ayuntamientos han alegado que van a intentar que estos servicios estén disponibles en temporada alta turística.

P: ¿A largo plazo cómo puede mediar el Cabildo para que esta situación no se produzca de nuevo?

R: Nosotros tenemos una relación con Costas que tiene sus más y sus menos, intentamos promocionar de manera continua un uso sostenible de la costa invirtiendo recursos para mejorar los lugares de baño y vamos a hacer nuestro papel de promotor de servicios de calidad. Con los ayuntamientos trabajamos también en determinados ámbitos como es el espacio comercial y el espacio público para que también mejoren su calidad. Si tanto Costas como los ayuntamientos quieren que el Cabildo se implique para la mejora de los servicios de playa, lo podemos hacer; no es un ámbito en el que nosotros hayamos entrado en el pasado, porque es municipal, pero si los dos ayuntamientos nos piden colaboración, atenderemos esa solicitud y podremos mediar con costas como lo hacemos en otras acciones para la mejora del entorno.

P: Jorge Marichal, presidente de Ashotel, proponía que el Gobierno de Canarias pida las competencias de Costas, ¿cómo lo valora?

R: Eso está previsto en el texto del Estatuto que está en el trámite final en el Congreso y que contempla la delegación, como tienen otras comunidades autónomas, para la gestión del dominio marítimo por parte de la comunidad autónoma. Pero eso tardará todavía en tener efecto, ya que aún queda un trámite para que entre en vigor y después se tiene que producir la delegación efectiva y, por tanto, la negociación con costas, que no es rápida normalmente. Está creada pero todavía tardará.

P: ¿Existe alguna forma de acelerarlo?

R: En el acuerdo que en su día firmó Coalición Canaria con el Partido Popular para apoyar la investidura de Mariano Rajoy se incluía dentro de la agenda canaria que se llevara a efecto algún mecanismo intermedio que permitiera que la comunidad autónoma tuviera más capacidad para influir en los asuntos que tienen que ver con el dominio marítimo-terrestre. Está por ver si este es uno de los asuntos que se mantiene dentro de la agenda canaria con el nuevo gobierno del señor Sánchez o no.

P: Si se hace efectiva la delegación de responsabilidades, ¿qué supondría para Canarias y Tenerife?

R: Yo creo que la costa, al igual que los aeropuertos o los puertos, son recursos muy importantes para el desarrollo económico de la región donde están enclavados y en el caso particular de Canarias, más aún porque somos regiones insulares muy orientadas al sector turístico. Creo que en la medida que la gestión de esos intereses esté más cerca de las necesidades de la comunidad autónoma será mejor y no hay que olvidar que la Dirección General de Costas ha invertido muy poco en Canarias en los últimos años.

Todo lo que sea mejorar la gestión de esos recursos de manera sostenible para no perjudicar al medioambiente, es bueno para nuestro desarrollo económico. Dará la posibilidad de dedicar más recursos a la mejora de la costa que tiene muchos puntos de degradación, tal y como denunciaba recientemente Greenpeace.

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