10 de mayo, esta es la fecha que se han marcado las grandes hoteleras españolas para arrancar de forma paulatina su actividad. Consultando la disponibilidad de reservas, NH Hotel Group y Barceló son las primeras en ofrecer algunos de sus establecimientos a partir de esa fecha. Le siguen los pasos Meliá, Iberostar y AC.

• NH: 10 de mayo
• Barceló: 10 de mayo
• Meliá: 18 de mayo
• Iberostar: 1 de junio
• AC: 1 de junio

Pese a que sus establecimientos permanecen cerrados desde el pasado 26 de marzo -salvo las honrosas excepciones que ejercen como centros medicalizados, lugar de descanso para sanitarios o como retenes-, los hoteleros no han permanecido ociosos y han trabajado a contrarreloj en implementar protocolos de seguridad e higiene para estar preparados para la desescalada. Sus soluciones pasan por sustituir los buffets por comida emplatada, implementar el check in online, establecer el móvil como llave de la habitación , limitar los aforos, instalar mamparas en recepción o entregar kits de prevención contra el virus.

A la misma fecha también apunta el comité científico que asesora al Gobierno de Canarias. De hecho, según la propuesta de desconfinamiento que quiere presentar el ejecutivo autonómico a Moncloa el próximo domingo y que ha filtrado el diario La Provincia. Y es que la propuesta es que los hoteles abran sus puertas con el aforo al 50%.

“Yo creo que el 10 de mayo no se va a poder abrir”, explica Juan Molas, presidente de la Mesa de Turismo a Tourinews. “Pero no porque lo crea yo, sino por todas las indicaciones que tenemos a nivel gubernamental sobre las medidas sanitarias y por toda la preparación que tienen que hacer los diferentes sectores turísticos para atender a nuestros clientes; no sólo los hoteles, sino que entran en acción aerolíneas, líneas de transporte y cada uno de los diferentes subsectores”, añade el ex presidente de la patronal hotelera Cehat.

Incide en que la adaptación técnica que van a necesitar los hoteles no se va a realizar “en cuatro días” porque los cambios deben implementarse en recepción, buffets, piscinas, espacios comunes, etc. y en la formación del personal. “Son temas que se están estudiando y nosotros como Mesa de turismo estamos participando también en ello y sinceramente no creo que dé tiempo de tenerlo preparado”.

No obstante, cree que es positivo que los hoteleros marquen una fecha en el horizonte: “Es esperanzador e ilusionante que algunos ya pongan esta fecha del 10 de mayo, pero no lo veo muy factible por esas circunstancias que comentaba”.

“Sin aviones, no tenemos clientes”

A todo ello apunta otro inconveniente: “Las fronteras no estarán abiertas y no me refiero a las terrestres con Francia y Portugal. Hay que esperar a que la Unión Europea determine cuáles son las medidas que las líneas aéreas tendrán que adoptar y, en consecuencia, cuál será la posibilidad del tráfico aéreo”.

Molas sí que ve cierta oportunidad en atender a la población local, pero recuerda que en lo que respecta a turismo internacional y, especialmente a Baleares y Canarias, “sin aviones, no tenemos clientes”.

“También nos llegan noticias de los grandes touroperadores europeos que no están haciendo su planificación para el 10 de mayo, la están haciendo para junio, sin precisar la fecha. Tienen la capacidad aérea pero ahora sus aviones están en tierra y sus tripulaciones en casa”, apunta el presidente de la Mesa de Turismo, que sí muestra un atisbo de esperanza con respecto a los TT.OO. que “han puesto a la venta de una forma activa las reservas para este verano, no solo a destinos españoles, sino también a competidores, pero no han fijado el día D”.

“Intervienen muchos factores, tenemos que tener en cuenta las decisiones que tomen la Unión Europea y el Gobierno español”, vuelve a recalcar.

“El gobierno tendrá que marcar una fecha concreta”

Aunque no tiene esperanzas en el 10 de mayo, Juan Molas insta al Gobierno a que proponga un plazo: “El gobierno tendrá que marcar una fecha concreta y esta tiene que ser una decisión política, naturalmente con el beneplácito de la autoridad sanitaria que es la que rige en estos momentos por encima de todo”.

Teoriza que puede llegar un momento en que la situación económica derive en una situación de tensión importante, por lo que sugiere que el Ejecutivo que marque una probable fecha de inicio de las actividades turísticas para “que se vayan preparando todos los sectores y para mandar un mensaje a toda la sociedad española, pero en particular a todos aquellos ciudadanos que estamos vinculados al mundo del turismo y que en España somos cerca de 2,7 millones”.

“Si hay que aplazarla, se aplaza, pero que de alguna forma tengamos claro que no vamos a dar por perdido el año”, asevera y lamenta los casos de “lamentables manifestaciones con su posterior desmentido” de algunos miembros del gobierno que han afirmado que el sector turístico no podrá volver a la actividad hasta final de año.

La clave: la unidad

“Tenemos que ir pensando de una forma muy unitaria todos los actores que estamos vinculados al turismo. Hay que marcar una hoja de ruta consensuada entre las administraciones públicas, no solo el gobierno central sino también los gobiernos autonómicos y los municipios, para definir cuál es el camino que tenemos que tomar para la recuperación de un sector tan importante como es el turismo que en el conjunto de España representa casi el 12,1%”, apostilla Molas.

Cree que dentro de dicha hoja de ruta se tiene que incluir una campaña de comunicación, “que no de promoción”, a todos los mercados extranjeros, especialmente, a los más importantes que en este caso son los europeos. En ella, apunta, hay que recordar la gran capacidad turística que tiene España y la competitividad turística del país: “Pediría al Gobierno, al Ministerio de Turismo, a Turespaña y a las comunidades autónomas que hicieran un esfuerzo común para mandar un mismo mensaje. No disparemos cada uno por nuestra cuenta gastando pólvora en salvas de honor”.

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