Del 5 al 15 de mayo, el municipio turístico de San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria) acogió el Maspalomas Pride by Freedom 2022, un festival que ha supuesto todo un impulso para los alojamientos del área.

Así lo constata Tom Smulders, vicepresidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), quien define el evento, que alcanzó su clímax con la cabalgata del pasado sábado, como “un éxito de impacto mediático y promocional”. Smulders cuantifica que el destino ha recibido entre 25.000 y 30.000 visitantes de fuera de isla y que el gasto sería próximo a los 50 millones de euros. “Tras festejar y dejar atrás en la medida de lo posible la agonía de la pandemia, van a ser nuestros más entusiastas embajadores”, sentencia.

“La ocupación turística en este último tramo de la semana, incluido sábado y domingo, estaba entre el 90-100 % en el círculo alrededor del Yumbo [centro comercial de referencia para el colectivo]”, explica.
 

Buenas sensaciones, pero lejos de la recuperación

El vicepresidente de la FEHT sostiene que ha habido un buen ambiente en general y que los complejos alojativos LGTB “tuvieron casi un lleno total”. No obstante, admite que aún están lejos de años como 2017 o 2019, cuando se registraron llenos absolutos en Maspalomas Costa Canaria. “Podemos estar contentos en su justa medida”, recalca y recuerda que el carnaval del verano (del 9 al 19 de junio) es ya su próxima meta.

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