Las patronales turísticas canarias Ashotel, Asofuer, FEHT y la Federación Turística de Lanzarote (FTL) han mostrado su preocupación por el posible impuesto al combustible aéreo (queroseno) en la Unión Europea, en los vuelos con origen o destino Canarias.
A este respecto, las patronales han recordado que el archipiélago es “absolutamente dependiente del transporte aéreo”, debido a su condición de región ultraperiférica, por lo que no dispone de “ningún otro medio de transporte alternativo”, algo que sí ocurre en el resto de países europeos.
Así, insistieron en que la “conectividad aérea es vital para la economía de la región”, debido a que ejerce como sustento a su motor económico: el turismo. Además, las cifras de turistas que visitan las islas no serían posibles sin estas conexiones. Tampo serían alcanzables "a través de otros medios de transporte".
"Lastrar el precio de los vuelos con destino Canarias con un impuesto al combustible aéreo tendrá un efecto disuasorio e impediente para los muchos usuarios que año tras año eligen Canarias como lugar preferido de sus vacaciones, penalizando al mismo tiempo las economías menos pudientes para poder acceder a destinos como el nuestro, lo que la convierte en una medida absolutamente antisocial", recriminaron las patronales en un comunicado.
En este punto, recordaron que el sector turístico en Canarias representa el 35% del PIB directo, así como el 70% del indirecto. Además, concentra el 40% del empleo. Por ello, insistieron en que esta medida "tendría un efecto generalizado y negativo en todo el ámbito socioeconómico del archipiélago", impidiendo su "adecuado desarrollo", cuando la tasa de desempleo en la región ya es superior al 20%.
En consecuencia, Ashotel, Asofuer, FEHT y FTl consideran que las Regiones Ultraperiféricas de la Unión europea (RUP) deben disponer de un trato adecuado a su condición en todos los ámbitos, especialmente en este. Así, piden la exención absoluta a los vuelos con destino a estas regiones, en las que el impacto contaminante será contrarrestado con el resto de medidas respetuosas con el medio ambiente.
En este sentido, se mostraron convencidas en la necesidad de reducir las emisiones contaminantes en todos los ámbitos. Por último, las patronales hicieron hincapié en que, de aprobarse ese impuesto se cometería un "gravísimo error inadmisible", algo que "pondría de manifiesto una vez más la falta de sensibilidad con Canarias".