ACTUALIZADO A LAS 15.20

La historia se repite en las cumbres de la isla de Gran Canaria. El pasado sábado, 10 de agosto, estalló un incendio en el municipio de Artenara, donde se encuentra el recientemente nombrado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco: el yacimiento arqueológico de Risco Caído y las Montañas Sagradas de Gran Canaria (estas últimas se extienden por los municipios de Artenara, Tejeda y Gáldar).

Esta crisis humana y medioambiental está teniendo una gran trascendencia internacional, ya que numerosos medios extranjeros de los principales mercados turísticos del archipiélago canario han informado sobre ella. Algunos de estos medios son los británicos The Guardian y Metro; los alemanes Berliner Morgenpost y Tagesschau; el austriaco Salz Burg 24; y el holandés De Telegraaf. Todos ellos hacen referencia a "la isla vacacional española de Gran Canaria" por la relevancia que tiene este destino turístico en sus paises.

Inicio de la tragedia

Todo apunta a que el fuego fue originado por unos trabajos con maquinaria de soldadura, ejecutados por un hombre de 55 años, que ya ha sido detenido por la Guardia Civil. En un principio se creyó que el incendio, que se formó alrededor de las 12.00 horas, se controlaría rápidamente, ya que se consiguió estabilizar el 85% de su perímetro, pero en la noche del sábado al domingo se reavivaron diferentes focos y las llamas se descontrolaron.

El incendio ha afectado a una superficie de 1.500 hectáreas de los municipios de Artenara, Tejeda y Gáldar. Aunque no ha alcanzado al yacimiento arqueológico de Risco Caído, sí ha ocasionado daños, aún por determinar, en las Montañas Sagradas, según informaron Ángel Víctor Torres, presidente de Canarias, y Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria, en rueda de prensa.

Lucha contra el fuego

El despliegue masivo de medios se pudo llevar a cabo ayer domingo, pasadas 24 horas del inicio de la tragedia. Para ello el Gobierno central envió un avión anfibio Canadair procedente de Málaga, así como un avión de carga en tierra de La Gomera y un helicóptero Kamov de 4.500 litros de descarga del aeropuerto Tenerife Sur. Por tierra han trabajado más de cien efectivos, a los que se sumaron 30 miembros de la Unidad Militar de Emergencias durante la noche. También colaboró una brigada de refuerzo contra incendios forestales de la base de Punta Gorda (La Palma). 

Las labores hoy, sin embargo, se han desarrollado a contrarreloj, debido a que el hidroavión que llegó ayer desde Málaga sufre una avería, por lo que permanece estacionada en la base aérea de Gando, donde está siendo reparada. Por ello, se ha solicitado el envío de otra aeronave, que podrá descargar agua a partir de las 15.00 horas. La idea es que, si el primer hidroavión es reparado a tiempo, puedan operar los dos para controlar el incendio. Ángel Víctor Torres, a su vez, ha anunciado que se espera una ola de calor en los próximos días, lo que complicaría las labores de extinción. 

Por otro lado, el Cabildo de Fuerteventura envió ayer diferentes materiales para combatir el fuego, como dos camiones pesados, una cuba de 10.000 litros, una nodriza, 7.000 litros de agua y 500 de espuma con bomba CAF, un vehículo Fsv con material de iluminación y dos vehículos 4x4. Por su parte, el Cabildo de Tenerife facilitó dos autobombas, cuatro vehículos y un equipo formado por 16 personas. 

Pueblo más bonito de España

Como medida preventiva, debido a la cercanía del fuego, se ha desalojado a cerca de un millar de vecinos de una veintena de núcleos poblacionales de Artenara, Tejeda y Gáldar. Cabe destacar que Tejeda figura como uno de los Pueblos Más Bonitos de España y que sufrió, precisamente, un voraz incendio en septiembre de 2017, hace tan solo dos años. 

Fuego, otra vez

En verano, debido a las altas temperaturas, es habitual que se active en Canarias la alerta por alto riesgo de incendios forestales, que este año estará vigente desde el 1 de julio hasta el 30 de septiembre. Y es que no es la primera vez que el fuego abrasa el monte de una isla canaria, en general, y de Gran Canaria, en particular. 

El 27 de julio de 2007, tuvo lugar un feroz incendio también en el municipio grancanario de Tejeda. El viento complicó enormemente las labores de extinción y las llamas se propagaron por La Aldea de San Nicolás, llegando a los municipios turísticos de San Bartolomé de Tirajana (Maspalomas), Santa Lucía y Mogán, así como por Santa Brígida. Finalmente, el fuego arrasó 20.000 hectáreas y ocasionó daños materiales cifrados en 90 millones de euros. Los expertos determinaron que la zona quemada tardaría en recuperarse totalmente unos 15 o 20 años.

Entonces, el incendio amenazó a la flora y fauna salvaje de Gran Canaria, pero también a los animales que permanecían en cautiverio en el zoológico Palmitos Park, ubicado en la zona turística de Maspalomas (San Bartolomé de Tirajana). Los trabajadores del recinto, ante la proximidad del fuego, liberaron a algunos animales, entre los que se encontraban diversas aves, aunque no pudieron salvarlos a todos. El zoo, finalmente, fue pasto de las llamas. 

El 20 de septiembre de 2017, como se mencionó anteriormente, otro incendio asoló a uno de los 'Pueblos Más Bonitos de España', nuevamente Tejeda, resultando afectadas 3.000 hectáreas. Uno de los enclaves más perjudicado por las llamas fue el Parador de Tejeda, un popular alojamiento de la localidad, considerado uno de sus principales revulsivos económicos. Un año después el establecimiento reabrió sus puertas totalmente rehabilitado. Cabe destacar que estos dos incendios fueron provocados. 

Carencia de efectivos

Ante este escenario, la repetición de incendios cada pocos años, los ciudadanos se han movilizado y han lanzado una petición en change.org, para que se habilite una base de hidroaviones contra incendios en Canarias. De esta manera, no habría que esperar al envío de este tipo de aparatos desde la Península, lo que ralentiza las labores de extinción. 

El impulsor de esta iniciativa, Aday Ruiz, considera que es "inaceptable que las islas no estén dotadas de medios aéreos suficientes para atajar los incendios desde un principio", así como que se tenga que esperar a que manden un hidroavión desde la Península, "una vez el incendió está descontrolado". La petición, al cierre de esta edición, contaba con 3.771 firmas. 

Ya en 2016, el piloto tinerfeño de aviación comercial Fernando Campos inició una campaña de recolección de firmas, en la plataforma citada, con la que reclamaba una base de hidroaviones contra incendios permanente en Canarias. A pesar de que han pasado tres años, la lucha sigue siendo la misma. 

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