Hassan Rouhani, presidente de Irán, ha admitido que el accidente del Boeing 737-800 NG de Ukraine International Airlines (UIA) en las proximidades del Aeropuerto Internacional de Teherán fue provocado por el ataque de una batería antiaérea de de las Fuerzas Armadas iraníes. En él murieron las 176 personas que viajaban a bordo: 82 iraníes, 57 canadienses (el gobierno de Canadá ha reducido recientemente la primera cifra de 63), 11 ucranianos, 10 suecos, 4 afganos, 3 alemanes y 3 británicos.

A través de Twitter Rouhani ha explicado que  “la investigación interna de las Fuerzas Armadas ha concluido que lamentablemente los misiles disparados debido a un error humano causaron el horrible accidente del avión ucraniano y la muerte de 176 personas inocentes”.  En un comunicado difundido a través del Ministerio de Asuntos Exteriores, ha matizado que debido a la escalada de tensión entre Irán y Estados Unidos sus Fuerzas Armadas “estaban al 100% alerta” lo que “desafortunadamente dio lugar a errores humanos y disparos falsos” que provocaron la “muerte de decenas de personas inocentes”.

Rouhani ha afirmado que la República Islámica de Irán “lamenta profundamente este trágico error” y ha expresado sus condolencias a las familias de las víctimas, así como a las naciones, gobiernos y familias de víctimas no iraníes.

Por último, ha apuntado que se necesita una investigación más profunda para identificar todas las causas de esta tragedia e identificar a los autores de “este error imperdonable”. También indicó que se deben adoptar los cambios y medidas necesarias para abordar las debilidades de los sistemas de defensa del país para evitar que se repitan desastres como este.

Se confirman las especulaciones

Desde el mismo día del accidente, algunas fuentes internacionales ya habían apuntado a que el avión había sido derribado por un ataque iraní. De hecho, el periódico jordano Al-Hadath ha apuntado, citando fuentes de cercanas a la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC), el avión fue derribado accidentalmente por Irán durante pruebas de una batería de defensa antiaérea rusa S-300 Favorit.

La publicación el día del jueves de un vídeo en el que supuestamente se podía ver el momento exacto en el que el misil impactaba con el avión comercial de pasajeros, incrementó la presión internacional sobre Irán.

El viernes, Justin Trudeau, primer ministro de Canadá, ofreció una rueda de prensa en Ottawa. Durante su intervención se convirtió en el primer líder mundial en acusar a Irán de haber derribado el jet de UIA. "Reconocemos que se ha hecho accidentalmente", afirmó y exigió que se llevase a cabo una investigación a fondo. 

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