Del 14 al 24 de marzo de 2019 San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria), más conocida por acoger los núcleos turísticos de Maspalomas y Playa del Inglés, celebró sus Carnavales, una de sus fiestas más populares tanto entre los grancanarios como entre los turistas.
El sábado 23 tuvo lugar la celebración de su cabalgata, congregando en el área a aproximadamente 300.000 personas. Muchos disfrutaron del desfile y de la música que llenaron las calles de este punto turístico, pero el comportamiento de todos no fue igual de cívico.
Tal y como han denunciado a través del grupo de Facebook ‘Mejoras para San Bartolomé de Tirajana’, los chiringuitos de playa de este municipio fueron víctima del vandalismo quedando destrozados “consecuencia de la fiesta y la poca vigilancia en la playa”. En las imágenes que encabezan este artículo se puede ver como, además de la suciedad acumulada, partes de estos kioscos fueron destrozadas, ofreciendo una imagen muy deficiente.
Los kioscos de la polémica
Lo cierto, es que antes de ser víctimas de los Carnavales, estos chiringuitos han sido foco de numerosas polémicas por su mal estado que, según los críticos, daña la imagen exterior de este municipio eminentemente turístico. En un artículo de opinión publicado en Tourinews, Juan Ferrer reseñó que estos establecimientos a pie de playa son “monumentos a lo cutre, lo sucio y lo antihigiénico”.
Desde el Ayuntamiento han trabajado para la instalación de nuevos quioscos, adquiriendo en 2012 por aproximadamente medio millón de euros 10 nuevas casetas que se recibieron en 2015 y desde entonces están guardadas en naves mientras se tramita el permiso para su instalación con Costas.
A principios de 2019 se hizo público que el consistorio tendrá que abonar 437.000 euros a la Demarcación de Costas en Canarias para poder instalar las nuevas casetas. Una cantidad que están renegociando al considerarla desproporcionada.
San Bartolomé
Esta población de poco más de 18 mil habitantes ubicada en el sur de la isla de Gran Canaria, registró en 2018 más de 12,5 millones de pernoctaciones, lo que la convierte en el tercer municipio con más pernoctaciones de España sólo por detrás de Barcelona y Madrid, según la encuesta de Ocupación Hotelera del Instituto Nacional de Estadística.