En la búsqueda de soluciones para solventar los problemas de acceso a la vivienda han surgido propuestas como la regularización de inmuebles en suelo rústico, como es el caso de Mallorca, o el cambio de usos de locales comerciales a vivienda, propuesta por el Ayuntamiento de Madrid; pero siempre aparece el miedo a que estas viviendas terminen dedicándose al alquiler turístico.
Ante dicha posibilidad, se ha pronunciado el alcalde madrileño, José Luis Díaz-Almeida, durante el pleno celebrado este miércoles. El primer edil ha recalcado que la normativa para regular las viviendas turísticas en la que están trabajando y que estará lista "a lo largo del último trimestre de este año" prohibirá expresamente "la transformación definitiva de locales comerciales en viviendas de uso turístico".
Martínez-Almeida ha subrayado en su intervención que solo se va a permitir la transformación de comercios en residencias; eso sí, recalca que este cambio de uso a residencial solo se podrá llevar a cabo "siempre que el local no se encuentre ubicado en ejes comerciales".