En términos parapsicológicos, se le llama telequinesia al desplazamiento de objetos sin causa física aparente, casi siempre en presencia de un médium. En un hotel centenario de Japón ocurre algo parecido: los objetos de ordenan solos.
Sin embargo, esto no tiene nada que ver con telequinesia ni poderes sobrenaturales. El Tonosawa Ichinoyu Honkan, fundado en 1630 en la localidad de Hakone, está considerado el primer hotel del mundo que aplica la tecnología ProPilot Park Ryokan de Nissan (la misma que usan los coches autónomos), y es la responsable de que los objetos cobren vida.
Hotel del futuro. Foto de Milenio
Por muy incrédulo que sea el huésped, lo mejor es que esté avisado de que al aplicarse esta tecnología, las zapatillas, los cojines o el mando de la tele se mueven por la habitación hasta ‘posarse’ en el sitio adecuado. Tan sólo basta pulsar un botón para que todos los objetos que no están siendo utilizados se coloquen automáticamente en su lugar.
Zapatillas con tecnología ProPilot
El secreto es el siguiente: los utensilios han sido manipulados para colocarles pequeñas ruedas y un sistema eléctrico conectado a un mando. Como si de un coche teledirigido se tratara, al pulsar un botón todo vuelve a su lugar como por arte de magia.
Este proyecto pionero se encuentra en fase de pruebas, pero, sin lugar a dudas, facilitará el trabajo del personal de cualquier hotel del mundo.
Otros adelantos tecnológicos en la hostelería
Aunque parezca cosa de ciencia ficción, hay innovaciones que pronto se aplicarán en el sector de la hostelería. En la pasada Feria Internacional de Turismo (Fitur), los asistentes pudieron comprobar que el hotel del futuro está a la vuelta de la esquina y estará ‘conectado’ y ‘personalizado’.
Habitación del hotel del futuro. Foto de Media Trends
Todo será posible, desde sistemas de reconocimiento facial incorporados en espejos para hacer los check-in de forma autónoma, hasta soluciones de descanso que monitorizan la calidad del sueño durante la estancia. También habrá llaves electrónicas para regular la temperatura, la televisión o la información que queremos recibir en nuestra propia habitación. Dichas innovaciones harán que el cliente se sienta como en casa, o como en una nave espacial. Eso dependerá de los gustos o las aspiraciones de cada cual.
