La ola de calor, a consecuencia de corrientes de aire caliente procedente de África, que está azotando a Grecia —con temperaturas de hasta 42-43º ha llevado al Departamento de Antigüedades de la ciudad de Atenas y al Ministerio de Cultura del país heleno a cerrar las puertas de la Acrópolis durante tres días consecutivos.
En concreto, durante las jornadas del 17,18 y 19 de julio se ha cerrado este conjunto arqueológico, el más visitado del país, entre las 12:00 y las 17:00 horas. El objetivo era proteger la salud de visitantes y trabajadores, evitando las horas de mayor incidencia del sol y del calor.
Desde la entidad gestora del monumento se han mostrado flexibles en la cantidad máxima de visitantes por hora y están permitiendo a aquellos que tenían reservada su entrada en el horario afectado por el cierre acudir en el horario de tarde (de 17:00 a 20:00 horas).
Asimismo, durante el horario de apertura, voluntarios y personal de La Cruz Roja Griega han estado presente en la Acrópolis para ofrecer agua fresca, primeros auxilios e información detallada sobre los potenciales riesgos derivados de las altas temperaturas. Se han distribuido más de 5.000 botellas de agua y se han atendido emergencias como golpes de calor o desmayos.