La condición de región ultraperiférica de Canarias a menudo ha sido un hándicap para la región, especialmente para la exportación e importación de productos y para la movilidad entre las propias islas y hacia el exterior. Sin embargo, ahora, la fragmentación del territorio canario y la lejanía del resto de Europa, se ha convertido en un verdadero escudo contra el coronavirus.
El director del Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales y Salud Pública de Canarias, Jacob Lorenzo Morales, manifestó en declaraciones a Tourinews, que la ventaja del archipiélago es que está “más aislado del resto del continente (Europa), donde cada vez hay más casos” y donde se están dando “brotes bastante potentes”.
El clima, otro factor de importancia
Pero esto no sería todo. Existe otro factor que aventaja a las Islas en la lucha contra esta enfermedad: el climático. Morales señaló, citando a la comunidad científica, que el calor suele afectar a la capacidad infectiva de la familia de coronavirus, a la que pertenece el Covid-19, al contrario que el frío, que propicia su abundancia.
Precisamente, las Islas Canarias destacan por su buen clima, algo que las ha convertido en uno de los destinos por excelencia de 'sol y playa'. Lo cierto es que el archipiélago cuenta con una temperatura máxima de media de 21º durante el mes de marzo, así como con una mínima de 15º, según el National Centers For Environmental Information (NOAA). En el mes de abril, las temperaturas suben un grado en cada caso, siendo las máximas de 22º y las mínimas de 16º.
Estos datos contrastan, por ejemplo, con los de Madrid donde, según la misma fuente, la temperatura máxima en marzo es de 16º y la mínima de 6º, mientras que en abril es de 18º y 8º, respectivamente.
La clave: puertos y aeropuertos
El Gobierno de Canarias, desde que se agravara la crisis sanitaria en España, solicitó la reducción de las conexiones aéreas y marítimas, puertas de acceso al Archipiélago y también de los casos importados de coronavirus.
De hecho el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana aprobó el 17 de marzo una serie de medidas, propuesta por el ejecutivo autonómico, para limitar el transporte aéreo y marítimo y así frenar la propagación del virus. Posteriormente, el gobierno canario trabajó en un plan para reducir, todavía más, las conexiones tanto entre las islas como entre la Península y el Archipiélago. Finalmente, anunció el pasado sábado, 28 de marzo, que a partir de ese mismo día y durante todo el Estado de Alarma, los vuelos interinsulares se reducirían, de los 18 por sentido que operaban antes, a 10.
En concreto, seguirán en funcionamiento las siguientes conexiones:
- Gran Canaria-Tenerife Norte: 3 vuelos por sentido.
- Gran Canaria-Lanzarote: 2 vuelos por sentido.
- Gran Canaria-Fuerteventura: un vuelo por sentido.
- Tenerife Norte-Fuerteventura: un vuelo por sentido.
- Tenerife Norte-La Palma: 2 vuelos por sentido.
- Tenerife Norte-El Hierro: un vuelo por sentido.
De esta manera, quedan inoperativas las rutas Gran Canaria-El Hierro; Gran Canaria-La Palma; Tenerife Norte-La Gomera; y Tenerife Norte-Lanzarote. En este sentido, Morales destacó que la reducción de la capacidad aérea entre islas es una buena estrategia, pues así se evita que se importen casos de las islas más afectadas (Tenerife y Gran Canaria) a las menos (El Hierro, La Gomera y La Graciosa —en esta última no se ha registrado ningún caso—). “Si hay un mayor movimiento de personas, existe la posibilidad de que haya un mayor número de infecciones”, matizó.
En cuanto a los vuelos entre la Península y el Archipiélago no se ha informado de novedades, por lo que se mantendría el número de conexiones (un total de 17) recogido en el Boletín Oficial del Estado n.º 72, del 17 de marzo.
Cabe destacar que, hasta las 20.00 horas del 3 de abril, las islas registraban 1.564 casos de coronavirus, de los que 632 han requerido ingreso hospitalario y 128 se encuentran en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). El Archipiélago, a su vez, contabiliza 123 altas y 78 fallecidos por esta causa. Por islas, la distribución de casos se distribuye de la siguiente manera: 946 en Tenerife; 435 en Gran Canaria; 69 en La Palma; 68 en Lanzarote; 35 en Fuerteventura; 8 en La Gomera; y 3 en El Hierro.
Blindaje dentro del Archipiélago
Desde el Archipiélago, asimismo, han ido llegando diferentes buenas noticias en lo que respecta a la lucha contra el virus. Por ejemplo, la isla de Fuerteventura recibió este miércoles, 1 de abril, el pedido realizado a Alemania de 50.000 test para diagnosticar el coronavirus, así como 100.000 mascarillas.
Al mismo tiempo, el área de Medio Ambiente del Cabildo de La Palma ha ideado un sistema para desinfectar los coches que llegan en barco a la isla. En concreto, ha habilitado un foso con agua y productos desinfectantes por donde pasan todos los vehículos al desembarcar. Así, se procede a la desinfección de las ruedas y bajos.
Los aeropuertos, un escenario desolado
Con las restricciones al tráfico aéreo del 17 de marzo, la movilidad entre islas quedó reducida al 6%. Tanto es así que se pasaron de 398 conexiones diarias a 36, un 90% menos. Con las nuevas medidas, tan solo se operarán 20 vuelos diarios interinsulares, un 96% menos, con respecto a la situación anterior al Estado de Alarma.
Estas medidas han dejado una estampa inusual en los aeropuertos canarios, ya que han quedado prácticamente desiertos. En este sentido, el Patronato de Turismo de Fuerteventura lamentó un hecho histórico, que tuvo lugar el viernes, 27 de marzo. Y es que, por primera vez en 30 años, la isla carecía de conexiones nacionales e internacionales en su parrilla de vuelos, donde solo constaban vuelos interinsulares.