Existen las tormentas perfectas en las que se unen borrascas, ciclones y huracanes, convirtiéndose en atípicos fenómenos naturales que arrasan con todo lo que encuentran a su paso. Por el contrario, también existen las oportunidades perfectas, en las que una situación de crisis del Todo (global), puede beneficiar de manera singular a una de las partes.

Esto es lo que ha estado viviendo el archipiélago canario (España) en los últimos meses. Y es que la pandemia del COVID-19 posicionó a Canarias como única región de Europa y gran parte del planeta, capaz de convertirse en el principal destino turístico del mundo en tiempos de coronavirus. Pero ¿ha aprovechado el archipiélago atlántico estas circunstancias favorables?

¿Qué ofrece Canarias a la industria turística en tiempos de COVID?

  • Las Islas Canarias, como territorio fragmentado, ofrecen unas fronteras definidas por sus costas. Además, cuenta con unas “puertas” de entrada y de salida (puertos y, sobre todo, aeropuertos)  fácilmente gestionables desde el punto de vista de control sanitario y de pasajeros.
  • A su vez, ofrecen una red de infraestructuras hospitalarias de primer orden que, hasta ahora, ha demostrado una enorme capacidad de reacción y contención ante el Covid-19.
  • Las islas son un destino turístico que, por la cercanía a sus principales mercados y por su climatología, opera 365 al año.
  • Se trata de prácticamente el único destino turístico invernal, de volumen y de media distancia para los mercados europeos. 
  • El techo turístico de las islas, se fijó en 2017 con 16 millones de visitantes, de los que 14,2 millones eran extranjeros.

Peso del turismo en la estrategia de Canarias

Desde el archipiélago, como es lógico, se observa al sector turístico como una de las principales locomotoras económicas. Sin ir más lejos, el 35% del PIB y el 40,4% del empleo en las islas dependen, directa e indirectamente, del sector de los viajes y de las vacaciones. Sin embargo, todo este peso económico no se traduce en una equivalente relevancia en las decisiones estratégicas y políticas del gobierno autonómico. Es probable que la inexistencia de un lobby regional —frente a la existencia de diversos grupos de presión insulares—, haya mermado la capacidad de influencia de este sector empresarial en las decisiones que afectan al conjunto del archipiélago.
 

Todo este peso económico del turismo no se traduce en una equivalente relevancia en las decisiones estratégicas y políticas del gobierno autonómico


Algo similar, aunque a otra escala, es lo que se ha vivido Alemania, donde ha habido que esperar hasta esta misma semana para la creación de un mega lobby turístico, nacido para que el sector se haga respetar en los mentideros y foros políticos. Uno de los objetivos principales de este proyecto es hacer entender a los representantes políticos la complejidad del turismo, y es que la gran mayoría toma decisiones sin haber terminado de entender cómo funciona este sector. ¿Sucede algo similar en España y concretamente en Canarias?

Reacción de Canarias ante la pandemia

Como parte de España, la comunidad autónoma canaria se ha visto forzada a seguir la estrategia-país en lo que se refiere a lucha contra la pandemia. Dentro de este contexto, y como destino vacacional maduro respecto de su trayectoria y experiencia, ha apostado por su “caballo ganador”: la temporada de invierno. Sin embargo, la estrategia-país no ha tenido en cuenta la singularidad turística de la región (única en España) y su necesidad de estar preparada para su principal temporada. Y es que la segunda ola de la pandemia de Covid-19 —que ya estamos viviendo—, posiblemente coincida con la época del año en la que más casos de gripe común se registran en Europa. ¿Habrá que realizar un test de Covid a todo el que tosa?

Con independencia de que todo se haya apostado a la carta de la temporada invernal y que esa vaya a ser la que decida la subsistencia económica de la región, ¿qué más ha hecho Canarias para asegurar su plaza entre los destinos turísticos abiertos?

La responsabilidad internacional de Canarias

Reactivar y mantener en marcha el negocio turístico tras la primera oleada de la pandemia debería haber sido, junto con la estabilización sanitaria, la prioridad de las Islas Afortunadas. Pero ese no es el único factor relevante. Es evidente que, con su potencial turístico, Canarias debería no solo erigirse como el principal destino turístico para touroperadores, agentes de viajes y aerolíneas; sino haberse convertido en el “socio” perfecto de los actores turísticos europeos pues, también era una forma de ayudarles a sobrevivir a la crisis. No debemos olvidar que en el caso de muchos touroperadores, más del 75% de su facturación anual se realiza en la temporada de verano, pero el invierno con Canarias, les permite mantener sus estructuras activas. En este sentido:

  • Si las agencias de viajes europeas hubiesen podido vender viajes al archipiélago canario, es probable que muchas se hubiesen salvado de la quiebra, lo mismo que algunos touroperadores.
  • Para muchas aerolíneas también hubiese supuesto una manera de seguir su operativa e impedir la paralización de cientos de aviones y tripulaciones. 
  • De la misma manera, gran parte de las cadenas hoteleras españolas de ámbito nacional e internacional veían en las Afortunadas la esperanza de mantener activo su negocio de verano e invierno, ambos. Las islas hubiesen sido en verano, para algunos mercados, el destino sustituto del Caribe, de Egipto, de Túnez y de otros destinos de sol y playa. En invierno hubiese vuelto demostrar, como hemos dicho, su hegemonía.

¿Qué posición ocuparía de haber sido la salvadora del sector turístico internacional?

Las islas se podrían haber proclamado “salvadoras del turismo” de Europa. Si bien es cierto que no cuentan con la capacidad para absorber la enorme masa de turistas del continente, su mantenimiento como destino turístico seguro hubiese supuesto un balón de oxígeno que hubiese permitido sobrevivir a muchas empresas de esta industria.
 

Para afrontar esta situación, valorada en 16.000 millones, ¿ha contado el Gobierno de Canarias con los mejores expertos en crisis del mundo? 

 

Surgen numerosas dudas

El negocio del turismo, tal y como lo conocemos hoy, ha funcionado en Canarias de manera cuasi automática desde sus orígenes y las crisis que ha sufrido a lo largo de su historia nunca habían parado del todo su maquinaria, hasta ahora. Con 16.000 millones de euros en juego —los que genera la industria turística directa e indirectamente en la región—, ¿se han tomado en esta ocasión las mejores decisiones?

  • Para afrontar esta situación sin precendentes, valorada en 16.000 millones, ¿ha contado el Gobierno de Canarias con los mejores expertos en crisis del mundo? 
  • Desde el comienzo de la crisis se ha generado un debate sobre si los test PCR debían realizarse en el país de origen o en el aeropuerto de destino. Es evidente que la mejor opción es la realización del test en origen, pero si esta ha sido hasta ahora inviable, ¿desechamos la segunda mejor opción?
  • Desde el 4 de mayo existe, como mínimo, una propuesta técnica y científica para realizar pruebas en todos los aeropuertos canarios, ¿se ha ignorado por completo al lo largo de estos meses? ¿se trata, como afirma la consejera de Turismo del Gobierno de Canarias, Yaiza Castilla, de un problema de la Unión Europea y del "eterno problema histórico de que en Madrid no se entienden las singularidades de Canarias"?
  • La otra gran discusión de los PCR gira en torno a su financiación. Desde el comienzo de esta crisis de demanda, el sector solicitó el apoyo inmediato de las instituciones públicas para llevar a cabo el control con PCRs, no solo de entrada, sino incluso de salida (para evitar al turista las cuarentenas al regresar a sus paises de origen). A lo largo de los meses se ha debatido sobre quien debe sufragar los tests, pero el empresariado ha encontrado poca reciprocidad por parte de las administraciones públicas y de los interlocutores políticos. Un gran número de estos empresarios han mostrado además su disposición a diseñar fórmulas de cofinanciación de este control sanitario, dispuestos incluso a renunciar a su beneficio anual con tal de salvar su negocio. ¿Se les ha tenido en cuenta y se les ha ofrecido alguna solución?
     

Se ha debatido sobre quien debe sufragar los tests, pero el empresariado ha encontrado poca reciprocidad por parte de las administraciones públicas y de los interlocutores políticos

 

Evolución de las tasas de contagio

Meses analizando soluciones, sin tomar ninguna decisión, meses identificando fortalezas, mientras cada nuevo brote de coronavirus debilita más al archipiélago. Y, así, la labor que tienen por delante el sector turístico y los organismos de promoción se hace cada vez más ardua, porque tienen que contrarrestrar con mensajes positivos y medidas que generen confianza las cada vez más altas cifras de contagios que se están registrando en el archipiélago. Sólo en agosto se ha registrado la misma cantidad de contagios que el total contabilizado entre febrero y julio. De hecho, en este mes se han dado 2.883 positivos, mientras que en los seis meses anteriores la cifra fue de 2.647.

Este aumento de las cifras se ha traducido en que, con el paso de las semanas, menos mercados emisores permiten viajar a Canarias. Esta es la situación actual:

En este contexto de pérdida de mercados, siguen sin llegar medidas y soluciones concretas. 
 

¿Existe un plan? 

 

¡La vacuna nos salvará!

Muchos empresarios turísticos, principalmente hoteleros, han manifestado sus esperanzas en el desarrollo y comercialización de las vacunas. ¿Realmente creemos que en los próximos meses habrá una vacuna con garantías probadas? El desarrollo, testeo y distribución de vacunas requiere tiempo, varios años. Por otro lado y ante la pregunta a algunos de estos empresarios y ejecutivos sobre si ellos se vacunarían, la contestación es inmediata: “Yo no, yo cuando lleve un par de años en el mercado!” Así las cosas, realmente ¿creemos que los británicos, alemanes, neerlandeses o escandinavos pensarán diferente y se vacunarán para poder disfrutar de vacaciones?
 

¿Realmente creemos que los británicos, alemanes, neerlandeses o escandinavos se vacunarán para poder disfrutar de vacaciones?


Previsiones

Más allá de si se halla una vacuna o no, todo indica que la recuperación aún está lejos. Volviendo a poner nuestros ojos en Alemania —segundo principal mercado turístico de España y principal potencia económica europea— el futuro pinta poco halagüeño. Esta misma semana, el gobierno germano ha anunciado la prórroga “hasta finales de 2021” de las ayudas al sector turístico nacional. En otras palabras, se están pertrechando para un duro “invierno” y podemos esperar lo propio del resto de paises emisores. El tiempo pasa y se encara el final de la temporada de verano con un balance bastante negativo. ¿Podra Canarias reconducir esta situación para salvar su economía y asumir su responsabilidad internacional? El invierno dictará sentencia.