Las dos jornadas de huelga de los taxistas de Barcelona celebradas el 25 y 26 de julio para protestar contra la actividad de las empresas con licencias VTC se ha saldado con numerosos altercados. Esta situación ha llevado a las principales empresas del sector, Uber y Cabify, a anunciar la paralización de su actividad en la ciudad condal.

A través de un comunicado emitido por la patronal Unauto, las compañías han asegurado que “suspenden temporalmente la actividad en Barcelona hasta que la situación vuelva a la normalidad”.

Desde el organismo destacan que pese a que han vivido “episodios de violencia” en otras ocasiones, los ataques sufridos en esta ocasión revisten de gravedad. En declaraciones a la agencia EFE, desde la agrupación han asegurado que “a un conductor le han quemado con ácido en la cara, con el que usan para quemar la pintura de los vehículos, y a otro le han dado una paliza y ha sido trasladado inconsciente al hospital”.

También ha sido ampliamente difundido el video en el que algunos de los clientes han sido agredidos por los taxistas. En la grabación, captada por el periodista Carlos Marquez para El Periódico de Catalunya se ve como un grupo de individuos asalta un vehículo de Cabidy ocupado por una familia de turistas franceses.

Los atacantes golpean el vehículo y empujan al conductor. Además, rocían en la cara con un espray de pintura al pasajero.

La patronal VTC ha criticado en su comunicado la "indignante la impunidad con la que operan estos grupos radicales" que han provocado daños también en vehículos de Uber y Cabify. En el citado documento, la organización ha expresado su apoyo a conductores agredidos y ha pedido disculpas a los clientes de Barcelona por las incidencias. Asimismo, han advertido de que van a “trabajar con las autoridades para que los culpables sean detenidos y juzgados" y han solicitado a las instituciones y fuerzas de seguridad que "intervengan y protejan a los miles de trabajadores del sector de las VTC, al que no solo se les niega su derecho a trabajar, sino que ven peligrar su integridad física de forma cada vez más acusada".

Desde el sindicato Elite Taxi han condenado y rechazado “enérgicamente y sin ningún paliativo” cualquier tipo de violencia o agresión. Aseguran que esa no es la forma “legítima” de hacer oír sus reivindicaciones. Aprovechan para recordar que su lucha “está en los juzgados” y que harán llegar su voz a las calles, pero de nuevo llaman a la calma y piden “tranquilidad y máximo respeto especialmente por las personas”.

Los taxistas protestan contra la reciente decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que paraliza el reglamento aprobado el 27 de junio por el Ayuntamiento de Barcelona por el que se exigía a los vehículos de alquiler con conductor (VTC) una segunda licencia para poder operar en la ciudad condal. El colectivo de taxistas incide en la importancia de mantener la proporción de una licencia de VTC por cada 30 de taxis.

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