Las camareras de piso —conocidas como las 'Kellys'— tomaron este domingo, 25 de agosto, la plaza Sant Jaume de Barcelona para protestar por las condiciones laborales del colectivo y exigir más dureza por parte de la Administración.

Medio centenar de manifestantes protestó bajo el lema “Trabajadora, no esclava”, queriendo visibilizar su situación. "Llevamos diez años exigiendo nuestros derechos ¡No aguantamos diez años más!”, ha manifestado Juani Pérez Sena, vicepresidenta del sindicato Kellys Unión Cataluña.

Denunciaron la precarización del sector, con cargas de trabajo “desproporcionadas”, y exigieron cambios legislativos y más inspecciones laborales con el fin de que se ponga freno a la externalización, se cumpla en materia de prevención de riesgos laborales y se reconozcan las enfermedades profesionales.

Responsabilidad de los huéspedes


Para la protesta también exhibieron una pancarta en la que se podía ver el estado en el que se encuentran algunas habitaciones, por lo que pidieron más responsabilidad por parte de los clientes. Y es que muchas veces enfrentan la dificultad de tener que limpiar estancias con “purpurina, ropa tirada por todas partes e incluso vómitos”.