Muchos pasajeros aprovechan los vuelos de larga duración para dormir con el fin de que la travesía se les haga menos pesada. Esta costumbre tan común genera ciertos problemas a los tripulantes durante los servicios de comida: ¿Permiten que el cliente siga durmiendo o le despiertan para avisarle de que procederán a servir los alimentos?
Ante esta disyuntiva, en la aerolínea rusa Aeroflot han llegado a una divertida solución y es que han ideado un sistema para que con un simple vistazo los TCPs puedan saber si el pasajero quiere ser despertado o no.
En concreto, han hecho uso de los habituales antifaces que se entregan para facilitar el sueño. Estas máscaras cuentan con dos caras, una colorida en la que se incluye el mensaje ‘Wake me up for meal’ (despiértame para la comida) y otra en blanco y negro en la que se indica ‘Do not disturb’ (no molestar). Del cliente depende decidir por qué lado se decanta.
Sin duda, un pequeño gesto que hace más fácil el trabajo de sus empleados y que mejora la convivencia a bordo.