“El cambio climático es una realidad”, destaca Ángel Simón Grimaldos, presidente de Agbar y vicepresidente de Suez España, Sur de Europa y Latinoamérica, en una entrevista en exclusiva para Tourinews.
La Tierra avanza hacia la superpoblación y la disponibilidad del agua cada vez será menor, por lo que la gobernanza pasará a ser un aspecto fundamental. Para conseguirlo, Ángel Simón tiene claro que lo más importante es “la gobernanza, mayor inversión en tecnología y la capacidad de gestión”, dentro de la que se hace imprescindible la “participación público-privada” y los acuerdos entre diferentes entidades. Además, para el presidente, esto también es la clave para conseguir uno de los objetivos de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas y que el agua sea accesible para todos los habitantes del mundo.
Pregunta (P): ¿Qué nos depara el futuro del planeta en lo que se refiere al agua?
Respuesta (R): Según el panel de expertos de las Naciones Unidas, el cambio climático es una realidad y muy probablemente se debe a la acción humana. Aunque China y otros grandes países asiáticos no están de acuerdo con este informa, la realidad es que los fenómenos atmosféricos son distintos. Las estadísticas reflejan que, cuando llueve, llueve más y que las sequías son más intensas. Entonces, tenemos un problema con la gestión del agua. En un futuro muy próximo vamos a ser 10.000 millones de habitantes en el planeta y no va a haber agua suficiente para la agricultura. Si queremos que esa agua esté disponible, tenemos que trabajar.
P: ¿Qué hay que hacer?
R: Llevar a cabo tres cosas. Una es la gobernanza, que significa que tiene que haber un acuerdo de cómo se gestiona el agua disponible. Segundo, tecnología. Tenemos mucha tecnología disponible, estamos invirtiendo bastante en mejorar la eficiencia del agua, pero como siempre, los recursos no son suficientes. Una empresa como la nuestra destina el 1,5% de sus ingresos a investigación, pero la media del sector es de 0,2% y la del Estado 0,5%. Hay que aumentar los recursos disponibles para investigación y mejorar nuestra tecnología. Y, tercero, capacidad de gestión. No todo el mundo puede gestionar el agua y esa capacidad tiene que estar relacionada con la gobernanza y la tecnología, lo que significa participación público-privada y acuerdos entre administraciones, empresas, estados y universidades.
P: ¿Está demostrado que esa conjunción público-privada es más efectiva?
R: Claro, está demostrado en los informes, donde se miden los indicadores KPI correspondientes. Lo que pasa es que cuando el debate pasa a ser ideológico, se olvidan los informes. Los ratios de garantía, continuidad y calidad del suministro de agua de Buenos Aires eran peores antes de que nuestra empresa la tomara en concesión. Luego, nos fuimos en 2005 y, desde entonces hasta hoy, el deterioro en la inversión y en todos los ratios se ha vuelto a ver. Por lo tanto, si ponemos encima de la mesa índices reales de calidad del servicio y del agua, yo creo que sí está absolutamente demostrados.
P: Estamos saliendo de una crisis sanitaria que ha tenido un impacto importantísimo en la sociedad. ¿Cree que esta crisis nos ha dejado un mensaje?
R: Nos ha dejado una tarea clara: tenemos que mejorar al máximo posible los servicios básicos para la ciudadanía. El principal es el servicio de salud, pero también debemos hablar de aquellos que afortunadamente no han fallado y que, si llegan a fallar, no hubiéramos superado la crisis como lo hicimos: el servicio de agua, energía, telefonía, datos, logística… Estos ámbitos han funcionado de una manera magnífica. Ahora hay que profundizar en cuáles son los elementos de mejora en cada uno de estos servicios para que nuestro sistema social no falle. Yo creo que esta sería la enseñanza.
P: ¿Cómo afecta la subida de la luz a un grupo como Agbar?
R: En la mayoría de nuestras explotaciones, nosotros hacemos la compra de energía con tiempo y, por lo tanto, tenemos comprada la energía hasta el año 2023 a precio fijo. Por lo tanto, somos muy conscientes de que en el 2023 tendremos un incremento del coste de la energía que va a significar un incremento del coste del precio del agua, al igual que va a significar un incremento del coste en todos los demás productos. Pero yo no quisiera quedarme al final del problema, sino al principio. Los problemas se resuelven en la base, con pactos y cooperación. Por lo tanto, hay que resolverlos en función al modelo energético que queremos en Europa.
P: Agenda 2030 de las Naciones Unidas habla de asegurar el acceso al agua para todos los habitantes del planeta. ¿En qué medida es esto realizable?
R: Va a ser realizable en la medida que exista en governance para hacerlo. En Latinoamérica, que llevamos muchos años trabajando, lo hemos conseguido hacer cuando ha habido una buena gobernanza e instituciones de calidad. Acuérdate de la trilogía que te he dicho: governance, desarrollo sostenible y tecnología. Eso es lo que necesitamos para que sea realizable.
*Este artículo forma parte de una entrevista dividida en cuatro fragmentos