“Está habiendo una revolución importante alrededor de todo aquello que podemos ofrecer de manera digital en los establecimientos”, destaca Carlos Parra, gerente de Development Media, en una entrevista en exclusiva para Tourinews. Development Media es una agencia que ofrece servicios de marketing 360 y, además, acompaña a sus clientes en la aplicación de soluciones digitales para sus negocios.

Una de las soluciones que ofrece esta agencia son los códigos QR, que se han convertido en una herramienta fundamental para abrirse a las oportunidades que genera el mundo digital, gracias a que son fáciles de identificar y usar. Por ello, Carlos Parra augura un buen futuro para los QR, aunque considera que el mercado se dirigirá hacia soluciones “más espectaculares en la reproducción de contenido”. De momento, el gerente aclara que todavía es necesario tener en cuenta a las personas menos familiarizadas con el uso de las tecnologías y apostar por herramientas que les faciliten la vida también a ellos, sobre todo en los establecimientos turísticos.
 

Pregunta (P): ¿Qué es Development Media?

Respuesta (R): Somos una agencia de marketing con sede en Lanzarote y Barcelona. Nos dedicamos principalmente al diseño gráfico y todo lo orientado hacia piezas publicitarias y, además, realizamos la aplicación de la imagen corporativa de nuestros clientes en todo tipo de soportes: papel, vinilo, rotulación en general, soporte digital... También ofrecemos soluciones digitales a nuestros clientes para que vayan a la vanguardia en cuestión de tecnología.

P: ¿Qué implica el proceso de digitalización?

R: Este proceso implica una apertura gigantesca en cuanto a las herramientas de corporación de los negocios. El mundo digital nos está abriendo grandes posibilidades, tanto comerciales como corporativas y a nivel de difusión, pero evidentemente, eso conlleva un trabajo de base importante y de larga duración.
 

P: ¿Cuáles puede ser un ejemplo de digitalización?

R: Ahora tenemos un elemento muy popular: el código QR, que se ha tenido que incorporar durante la pandemia por temas sanitarios. Es una herramienta clave y muy directa, que todo el mundo reconoce rápidamente. Además, nos ha permitido actuar de una manera muy rápida, principalmente porque lleva en el mercado más de una década y está muy posicionada, a pesar de que haya tenido momentos de auge y otros de menos visibilidad. Entonces, ahora que ha vuelto a arrancar, el QR nos da muchas posibilidades porque, dentro de lo que es la tecnología, es muy rápido de aplicar y ofrece acceso directo a todo tipo de contenido de interés.

P: Aparte del código QR, ¿qué otros elementos digitales hay disponibles para las empresas?

R: Motores de reserva, que ahora mismo son muy importantes tanto para el turismo como para la mayoría de comercios, ya sean hoteles, restaurantes o un salón de estética, por ejemplo. También tenemos herramientas como aplicaciones para el teléfono móvil que los comerciantes utilizan para ofrecer todos sus servicios y actualizar su portfolio de productos; contenidos digitales en televisión, que se están usando mucho para tener feedback visual a través de pantalla… Está habiendo una revolución importante alrededor de todo aquello que podemos ofrecer de manera digital en los establecimientos, desde la exposición hasta la venta y difusión a través de herramientas de este tipo.

P: ¿La pandemia ha propiciado la consolidación del código QR?

R: Realmente el QR ya venía consolidado y, precisamente, eso es lo que nos ha permitido ejecutar la herramienta con tanta rapidez en un momento como el que hemos atravesado. Pero es cierto que no se le daba el uso intensivo que se le ha dado durante la pandemia y eso ha generado que se empiecen a trabajar muchas más opciones alrededor de esta herramienta, lo que le da una larga vida a la propuesta del QR.

P: Todos estamos muy familiarizados con los códigos QR para acceder a la carta de un restaurante, por ejemplo. Pero, ¿qué otros usos se les puede dar a esta herramienta?

R: Un QR es un acceso directo a una determinada información que está en la red. Al escanear el código, accedemos a esa información. Pues, a partir de ahí, su aplicación es casi infinita y muy variable. Podríamos utilizarlo para abrir una dirección directamente en Google Maps o, por ejemplo, para obtener más información sobre un cuadro en una galería de arte. Hoy en día, todo el mundo sabe que detrás de un QR hay más información a la que el cliente puede acceder si está interesado.

P: ¿Y qué ocurre con las personas de avanzada edad, ya sean turistas o no, que no saben manejar las nuevas tecnologías? ¿Se contempla hacer campañas de marketing específicas para ellos o es una labor de la empresa?

R: Sí, es un trabajo importante que se tiene que hacer, aunque no es sencillo. Por ejemplo, todavía hay casos en los que te tienes que descargar una aplicación para leer el código QR y eso ya representa un hándicap para una persona mayor. Pero la mayoría de los terminales tienen incorporado un sistema para reconocer los códigos y acceder directamente a la información. Eso ya facilita muchísimo el procedimiento para estos perfiles. Aun así, es cierto que es importante poner cartelería con instrucciones sobre el uso de esta herramienta, por ejemplo. Esto es algo básico. Otra solución que nosotros trabajamos es poner códigos QR para acceder a la clave del Wifi de los establecimientos, para los turistas que no tienen datos, que es algo bastante tedioso. El QR requiere de creatividad porque es una herramienta básica y, a partir de ahí, dependiendo de todo lo que se te ocurra, tienes muchas más posibilidades de las que realmente parece.
 

P: ¿Cuánta vida pronostica al código QR?

R: Es difícil de predecir, la verdad, porque el mercado evoluciona mucho y salen nuevas propuestas. Pero, tecnológicamente, es una herramienta sencilla y fácil de identificar y eso es lo que le otorga la popularidad y yo creo que por lo menos, le queda una década más por delante. Desde hace años hemos tenido herramientas muy evolucionadas que se han quedado en stand by por su complejidad o por no ser muy identificables. Entonces, sí creo que el futuro va hacia este tipo de herramientas, que son un poco más espectaculares en cuanto a la reproducción de contenido, pero tendremos que esperar a que las generaciones más jóvenes tengan dinero para gastar –porque realmente esto es una herramienta comercial– para que evoluciones un sistema de este tipo.

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