El modelo de aeronave Boeing 737 MAX volverá a surcar los cielos europeos tras casi dos años en tierra debido a los dos accidentes —en solo seis meses y que se cobraron 346 vidas— producidos principalmente por un fallo en su sistema de seguridad MCAS. La Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) ha dado su aprobación para el regreso de este avión después de haber sido debidamente modificado por el fabricante y revisado por la propia agencia europea.
La EASA ha tardado más tiempo en aprobar la vuelta del 737 MAX que sus entidades homólogas en Estados Unidos o Brasil debido a que la agencia europea ha realizado un exhaustivo análisis de la aeronave, de manera independiente, tal y como explica la propia agencia en un comunicado. De hecho, la EASA ha afirmado que seguirá “monitorizando muy de cerca” las operaciones con este modelo.
La EASA ha dado el consentimiento para la vuelta del 737 MAX después de que Boeing haya cumplido con los cambios y condiciones exigidas por la agencia europea:
- Las causas de los dos accidentes se consideran debidamente entendidas (fallo en el software MCAS, incapacidad de la tripulación para desconectar el sistema de seguridad, problemas en el cableado eléctrico).
- Los cambios de diseño propuestos por Boeing para abordar los problemas destacados por los accidentes serán aprobados por la EASA y su realización es obligatoria.
- La EASA debe realizar una revisión completa del diseño y de los cambios, que debe ser independiente.
- Las tripulaciones de vuelo del Boeing 737 MAX deben recibir una formación específica, incluida la simulación de vuelo.
En Europa, las dos únicas compañías aéreas que operan con este modelo son TUI y Ryanair. Ambas han confirmado que retomarán la actividad con el 737 MAX, aunque TUI dará la opción a sus pasajeros de cambiar de aeronave cuando les toque volar en él.