El Cabildo tinerfeño reunió el pasado miércoles día 11 a más de un centenar de representantes políticos y técnicos municipales de todos los municipios para abordar de la mano de expertos la regulación del alquiler vacacional en la isla de Tenerife, una modalidad turística que ha irrumpido con gran fuerza en el destino.
La apertura de la jornada corrió a cargo del presidente accidental del Cabildo, Aurelio Abreu, quien ha destacado la importancia del consenso y la coordinación entre administraciones en un asunto “tan complejo” como éste.
El consejero insular de Turismo Alberto Bernabé señaló que “se trata de un fenómeno muy dinámico al que no se puede aplicar una solución estandarizada y que requiere de un análisis muy exhaustivo”.
Bernabé manifestó que este foro es una de las herramientas que utilizará el Cabildo “para asumir el liderazgo que nos corresponde en esta materia aunque la Corporación insular seguirá trabajando intensamente durante los próximos seis meses que se estima que durará el proceso de alegaciones del borrador de decreto”.
El viceconsejero de Turismo del Gobierno de Canarias, Cristóbal de la Rosa, valoró la celebración de este encuentro, “una excelente iniciativa que reúne a las administraciones para debatir acerca de los diferentes elementos de la normativa que competen a las instituciones públicas en concreto, y a todos los agentes del sector en general”. Además, destacó que “el trabajo conjunto entre el Gobierno, los ayuntamientos y los cabildos es clave para lograr que la regulación de esta modalidad turística se implante de una manera eficiente beneficiando al interés general”.
El borrador del decreto que regulará el alquiler vacacional en Canarias limita esta actividad al suelo residencial y la excluye, con carácter general, de las zonas turísticas aunque los cabildos y los ayuntamientos podrán establecer excepciones en sus respectivos ámbitos territoriales.
Durante la jornada intervinieron expertos como el profesor de la Universidad de la Laguna Moisés Simancas, quien ha puesto sobre la mesa las ventajas y los inconvenientes de esta modalidad turística; Luis Falcón, CEO de inAtlas, Big&Data & Location Analytics, que ofreció los datos sobre este fenómeno en Tenerife y Canarias; y la abogada Rosa Elena Martínez, que se centró en el borrador del decreto del Gobierno de Canarias y realizó una comparativa con otras comunidades autónomas.
Algunos datos
En una primera aproximación al ‘tsunami’ del alquiler vacacional, que supone ya más del 12% de la oferta de plazas alojativas si se tiene en cuenta tanto las viviendas inscritas como las que están en trámite, el Cabildo apuesta por defender en sus propuestas el interés general por encima de intereses particulares. El modelo de desarrollo turístico de Tenerife está sustentado en la calidad, en el cuidado del paisaje y del espacio turístico de forma que el desarrollo del alquiler vacacional tiene que ser compatible con esta estrategia que ha llevado a Tenerife a ser líder mundial.
Tenerife cuenta en la actualidad con una oferta de unas 12.493 viviendas vacacionales que se publicitan en diferentes plataformas de Internet, de las que solo 4.712 están registradas o en trámite en el Cabildo a través de una declaración responsable que deben realizar sus propietarios. Ello se traduce en que, en realidad, se ofertan dentro de esta modalidad un total de 52.435 plazas frente a las cerca de 18.900 de las que se tiene constancia.
Un 9,2 por ciento de los turistas que pasaron sus vacaciones en Tenerife el año pasado utilizaron para alojarse una vivienda vacacional, un porcentaje que supone una estimación de unos 500.000 turistas alojados en esta modalidad en 2017. Franceses, italianos y alemanes son las principales nacionalidades de los visitantes que optan por esta modalidad de alojamiento seguidos de irlandeses, holandeses y belgas.