Agentes del Cuerpo General de la Policía Canaria y de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria han denunciado al administrador de una cadena hotelera con establecimientos en las islas de Gran Canaria, Tenerife y Fuerteventura como presunto autor de dos vertidos de residuos en barrancos ubicados en los municipios de Agüimes y de Las Palmas de Gran Canaria.
Los cuerpos policiales han formulado una denuncia contra el empresario por la comisión de los vertidos por el que deberá afrontar multas de hasta 100.000 euros, además de la obligación de restituir el daño medioambiental causado.
Tourinews se ha puesto en contacto con la supuesta compañía infractora, pero no ha podido obtener una confirmación al respecto.
Una investigación conjunta
La investigación se inició en marzo, cuando un agente de la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria detectó que se habían abandonado 14 bañeras de fibra en el cauce del barranco de San Lorenzo, una zona cuyo suelo está protegido por su valor agrario. También se hallaron embalajes de platos de ducha comercializados por una conocida empresa de venta de materiales para la construcción. A partir de los datos de clientes facilitados por la empresa, se detectó la compra reciente de 25 platos de ducha por el administrador de una conocida empresa hotelera del Archipiélago.
Bajo la sospecha de que las bañeras abandonadas procedían de una reforma hotelera, se realizó una inspección en uno de sus establecimientos en el municipio de Mogán, donde se comprobó que se estaban sustituyendo bañeras cuyas características coincidían con las halladas en San Lorenzo. Además, la empresa hotelera no pudo acreditar qué destino le estaba dando a las bañeras que había sustituido, una información que tiene la obligación legal de poner a disposición de las fuerzas policiales.
Asimismo, durante la inspección, llevada a cabo por la Policía Autonómica, se comprobó que otros materiales como las cortinas que se estaban retirando, eran idénticas a las halladas en otro macrovertido detectado en un espacio cercano a la playa de Vargas del municipio de Agüimes, sobre un suelo protegido por su valor paisajístico.
Tras el hallazgo, los agentes regresaron a Vargas para realizar una inspección, pudiendo hallar varios materiales como sábanas y cortinas que contenían etiquetas con el nombre comercial del hotel, además de otras 14 bañeras.