La crisis del coronavirus ha llevado a Iberia a presentar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) el jueves 19 de marzo, que tendrá una duración inicial de tres meses y afectará al 90% de su plantilla (empleados de las áreas de vuelo, handling, mantenimiento en línea y carga).
Desde la aerolínea de bandera de España han aclarado: "Todas las áreas de negocio relacionadas directamente con la operación se verán afectadas por el ERTE en la misma proporción que la reducción de capacidad". Pese a ello, ha manifestado que seguirá la evolución de esta crisis "para dilucidar si fuese necesaria una ampliación posterior o una recuperación anticipada de la actividad".
En lo que respecta a los servicios centrales y oficinas, la medida afectará al 70% de los empleados. En cuanto a las actividades de Mantenimiento, Motores se verá afectado durante los tres meses en un máximo de un 60%, mientras que en Mantenimiento Mayor la afectación será de un máximo del 80% los dos primeros meses y de un máximo del 90 el tercero. Por último, el área de Componentes se verá afectada en un 70% como máximo.
Ajustes en el programa de vuelos
Al mismo tiempo, la compañía ha reducido su programa de vuelos de acuerdo con las restricciones impulsadas por distintos países, como España. El objetivo de la línea aérea es garantizar una mínima conectividad en España, tanto en el corto, como en el medio y largo radio. De esta manera, permitirá el regreso a casa de los españoles varados en el extranjero y viceversa.
En este sentido, ha lanzado políticas de flexibilización de los billetes y ha subido a su site un formulario para agilizar las peticiones. Así, los pasajeros con billetes programados hasta el 30 de abril podrán pedir un bono por el importe de su billete, válido hasta el 31 de marzo de 2021, sin restricciones de fechas y destinos. El cambio de reservas se podrá efectuar sin costes adicionales.
Ahorro de costes
La compañía ha recordado que, desde el inicio del brote, ha impulsado medidas de ahorro y contención de costes, como la paralización de las contrataciones externas o servicios de consultoría, la cancelación de gastos discrecionales o la formación corporativa.
Por último, incidió en que ha seguido las recomendaciones de las autoridades nacionales e internacionales, extremando todas las precauciones, en aras de proteger a los clientes, empleados y proveedores. También, ha puesto en marcha protocolos de actuación ante casos sospechosos de coronavirus y confirmados.