El reposicionamiento y el rebranding, fundamentales para la sostenibilidad de un negocio gastronómico, no solo amplían la subsistencia del mismo, sino que convierte una empresa en declive en un modelo de beneficio. Así lo asevera Mika Ferrer, CDO de Do Experts, empresa especializada en el reposicionamiento gastronómico, con más de 70 proyectos a sus espaldas y el conocimiento directo de ser propietario de 9 restaurantes.

Relata el caso de éxito del Ginger Fresh & Natural que consiguió cambiar un concepto anticuado y convertirse en un beach house en primera línea del mar, que ha conseguido un incremento de rentabilidad de un 400%.

Antes y después de un concepto

Ferrer relata que Ginger, como cientos de negocios en España, sobre todo en las costas, era una cafetería de los 80, anticuada tras 20 años de poco cambio y que renació en 2015, fruto de una necesidad de mercado.

El equipo de Do Experts detectó, tras un análisis previo, que el establecimiento podía explorar un nicho nuevo en el mundo de la gastronomía: el concepto Healthy, en primera línea del mar y así atraer a deportistas, gente atlética que busca una alternativa sana a un destino turístico anquilosado.

El Cambio necesario

“Cambiamos de nombre, cambiamos de enfoque, cambiamos de carta, nos ponemos más gourmet, nos ponemos a hacer una carta sostenible, cercana a precio, pero a la vez fresca y natural…”, relata y añade que de ahí nace el nombre de Ginger Fresh & Natural, con platos muy healthy, frescos, con el aporte de los nutrientes correctos… La transformación afectó también a las bebidas, optando por las no tan alcohólicas, como smoothies, busters, los latte, tés…, añade.

Fueron explorando en pequeños departamentos que estaban inactivos en destinos de costa en España y crearon lo que ellos denominan una marca muy femenina, muy "cozy" basándose en el entorno: mediterráneo, las Islas Baleares, costa de Francia y la Provenza. El restultado era el equilibrio entre un local sostenible y un beach club, sin más pretensión que la de ser un local con una cocina ligera y fresca.

La diferenciación en todas las áreas

En lo que respecta al diseño, comenta Ferrer, el objetivo era crear una coctelería divertida, femenina y con muchas opciones en un local enfatizado por su enorme terraza y que cada centímetro del local estuviese cuidado a fondo. Con una base blanca, se jugó con matices en una paleta de colores pasteles entre amarillos, verdes aguas, verdes, turquesas y azules.
 

La mejora en las técnicas de marketing, carta, servicio, estética, rediseño, etc. consiguieron cuadruplicar no solo la facturación sino también el beneficio y, también, el prestigio del local. "Es un local muy conocido, es un local muy querido, es una marca internacional, tiene un montón de seguidores, un montón de adeptos, tenemos muchísimo cliente repetidor y poder trabajar con clientes cautivos repetidores y que la misma vez cada semana logremos captar la atención a turistas que vienen buscando Ginger, para nosotros, pues es una clave de éxito", comenta Mika Ferrer. Quien recalca que Ginger fue de los primeros que apostó por el mundo healthy. "Ser pionero en algo siempre te hace más atractivo", concluye.

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