La pandemia de Covid-19 ha estallado en el peor momento para Boeing, que precisamente lidiaba con la crisis del Boeing 737MAX, protagonista de dos accidentes mortales en 2019. Y es que el fabricante estadounidense registró pérdidas de 2.400 millones de dólares en el segundo trimestre del año.
La facturación, por su parte, se precipitó un 25% de abril a junio de este año, hasta alcanzar los 11.800 millones de dólares, mientras que el flujo de la caja fue de 5.300 millones. Boeing cerró junio con más de 30.000 millones de liquidez, pero acumula una deuda de más de 60.000 millones.
Por otro lado, la compañía entregó 20 aviones en este período, 70 menos que en el segundo trimestre de 2019. Tiene pendientes, a su vez, la entrega de 4.500 aviones por valor de 362.000 millones, unos 800 menos.
"Estamos trabajando de cerca con nuestros clientes, proveedores y socios globales para manejar los desafíos de nuestra industria, tender un puente hacia la recuperación y reconstruir para ser más fuertes en el otro lado", manifestó al respecto el presidente y director ejecutivo de Boeing, Dave Calhoun.
Actualidad del 737MAX
Sobre la vuelta a los cielos del polémico 737 MAX, la compañía aseguró que ha desempeñado un "progreso constante hacia el regreso seguro al servicio del 737, incluyendo la finalización de las pruebas de vuelo de certificación de la FAA (Administración Federal de Aviación de EE.UU.)". Por ello, espera que el avión vuelva a operar a finales de este año, aunque algunos expertos consideran que ese momento no llegará hasta principios de 2021.
La crisis del 737 MAX sumada a la sanitaria ha dejado un escenario complicado para Boeing. Como consecuencia, ha anunciado ajustes en la producción de aviones comerciales y en la plantilla. "Estamos tomando las medidas adecuadas para asegurarnos de estar bien posicionados para el futuro, fortaleciendo nuestra cultura, mejorando la transparencia, reconstruyendo la confianza y transformando nuestro negocio para convertirlo en un Boeing mejor y más sostenible", enfatizó Calhoun.
Ajustes de producción
El fabricante tiene previsto producir dos unidades del modelo 777 al mes, en 2021, así como seis del B-787 mensuales en el mismo año. En cuanto al 737 MAX, tiene pensado ampliar la producción hasta las 31 unidades mensuales a principios de 2022.
Fin del Jumbo (B-747)
Boeing, al mismo tiempo, planea dejar de producir el icónico Jumbo, el B-747, en 2022, debido a la baja demanda entre sus clientes. Hasta entonces, los niveles de producción de la aeronave serán los habituales.
Estos cambios en la producción, aseguraron desde la compañía, traerán consigo más recortes en la plantilla. El pasado abril, ya anunció la destrucción de 16.000 empleos, el 10% de su plantilla global. En esta ocasión, no ha especificado el número de damnificados.