TUI Group ha presentado los resultados correspondientes al tercer trimestre del año fiscal 2022. Uno de los aspectos más llamativos en las cuentas del gigante turístico de Hannover (Alemania) es cuántas pérdidas le ha supuesto el caos aéreo que se ha desatado en Europa durante el verano y que se ha saldado con numerosas cancelaciones y cambios de ruta.

La compañía cifra en 75 millones de euros el coste de afrontar las irregularidades que se han producido en el mercado aéreo. Destacan que han sido particularmente pronunciadas en Reino Unido. De hecho, subrayan que, entre mayo y junio, tuvieron que cancelar cerca de 200 vuelos, la mayoría de ellos con salida desde el Aeropuerto de Mánchester.

No obstante, restan hierro a la situación y destacan que las cancelaciones suponen menos de un 1% de su programa de vuelos estival.

A punto de abandonar los números rojos

Lo cierto es que el impacto del caos aéreo es innegable, más si se tiene en cuenta que sin esos 75 millones perdidos, la compañía podría haberse anotado su primer trimestre positivo desde el inicio de la pandemia. De abril a junio de 2022, el grupo se mantiene en números rojos, con una pérdida de 27 millones de euros. Si se tiene en cuenta el acumulado de los nueve meses del año, anota una pérdida operativa de 631 millones de euros.

Aunque sí que ha mejorado en otros ámbitos: Las ventas aumentaron hasta los 4.400 millones de euros en el tercer trimestre, casi siete veces más que en el mismo período del año anterior (650 millones de euros).
 

Un “fuerte verano” lleva a TUI a pronosticar beneficios

Desde el gigante turístico se muestran convencidos de que las pérdidas acumuladas se compensarán a final de año gracias a una “fuerte temporada de verano”, y es que aún tienen que sumar las ganancias de su período de mayor facturación: los meses de julio a septiembre.

Para el período estival al completo desplazarán a 11,5 millones de viajeros, lo que supone un 90% del nivel que operaban en 2019. El nivel de reservas para julio y agosto se sitúa en un 93% de los datos prepandemia. Por su parte, la media de precios es un 18% más alta que en prepandemia.

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