El gigante turístico TUI Group ha presentado el balance económico del noveno mes de su año fiscal —que comienza en octubre—, que evidencia que las reservas aumentan a medida que se eliminan restricciones de viaje, así como que el cliente está tornándose cada vez más digital. En términos generales, el flujo de caja durante el tercer trimestre se ha situado en torno a los 320 millones de euros, positivo por primera vez desde el inicio de la pandemia.

Sin embargo, el resultado bruto de explotación (EBITDA) durante los 9 primeros meses del ejercicio de TUI se sitúa en negativo: el Grupo tuvo unas pérdidas netas de 2.046,6 millones euros, un 2,9 % más elevada que hace un año, aunque la demanda de viajes sigue creciendo.

Así, el grupo ha registrado un total de 4,2 millones de reservas para el verano de 2021, de las cuales 1,5 se han producido desde mayo. De las reservas realizadas en el tercer trimestre del ejercicio, más de la mitad (52%) se realizaron de manera digital. Asimismo, el 70% (crece 21 puntos porcentuales) de los clientes de paquetes vacacionales utilizan la aplicación de TUI para interactuar con la compañía.


 

En cuanto a las medidas del grupo para “fortalecer su estructura de capital”, desde TUI resaltan la venta de 21 activos, hoteles vendidos a la cadena RIU que seguirán siendo operados conjuntamente por ambas compañías; así como el acuerdo alcanzado con las diferentes entidades financieras —19 bancos internacionales y KfW— para extender el vencimiento de las líneas de crédito, por lo que el gigante turístico dispondrá de más tiempo para saldarlos, “en vista de las restricciones por el coronavirus en curso”.
 


“Nuestro modelo de negocio y la fuerte marca TUI siguen siendo un éxito y son la garantía de un buen reinicio de la actividad”, ha declarado Fritz Joussen, CEO del Grupo. Aunque aclara que la recuperación no se está dando por igual en todos los países: “Allá donde el Estado devuelve la libertad empresarial tenemos mucho éxito; donde los gobiernos restringen, estas intervenciones impactan en las reservas”.

En este sentido, Joussen ha puesto de ejemplo al mercado británico: “En Inglaterra, los viajes pudieron reanudarse solo a partir de julio, por tanto, la demanda y las reservas se verán reflejadas en los resultados del cuarto trimestre”.