Se cumplen 50 años del conocido como ‘Milagro de los Andes’, uno de esos fatídicos viernes 13 ocurridos a lo largo de la historia del turismo. En este caso se trata del accidente del avión 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya, que se estrelló en los Andes y en el que solo sobrevivieron 16 personas de las 45 que viajaban a bordo.
Lograron sobrevivir 72 días, pese a que las labores de búsqueda se suspendieron solo ocho jornadas después del accidente
El avión, un Fairchild FH-227D, despegó del Aeropuerto Internacional de Carrasco (Montevideo, Uruguay) el 12 de octubre con destino Santiago de Chile. No obstante, debido a las inclemencias meteorológicas, el piloto decidió hacer una parada en Mendoza (Argentina). A pesar de que el clima no había mejorado, la aeronave despegó de Mendoza a mediodía.
Zona del accidente. La línea de puntos verdes es la ruta de descenso de los supervivientes. Caminaron unos 38 km durante 10 días. | Foto: Createaccount (CC BY-SA 3.0)
Finalmente, un error de cálculo del piloto hizo que el avión colisionase en repetidas ocasiones con la montaña, para terminar deslizándose y chocando con un glaciar. El fuselaje de la aeronave —la cola y las alas se habían perdido en el primer impacto con la montaña— quedó atascado a una altura de 3.570 metros en Malargüe (provincia de Mendoza).
Más de dos meses después del accidente, 72 días más tarde, los 16 supervivientes de la catástrofe fueron rescatados. Todo ello, gracias a los esfuerzos de tres de los pasajeros, que salieron en busca de ayuda, sin equipo técnico, ni mapa, ni brújula, ni experiencia de escalada. Los trabajos de búsqueda se habían cancelado a los ocho días del accidente, ya que, a pesar de que los equipos de rescate pasaron varias veces por la zona, confundieron el fuselaje blanco del avión con la nieve.
Su historia se hizo particularmente conocida debido a la película ¡Viven! (1993), aunque también se han publicado al respecto numerosos libros, algunos de ellos escritos por los propios protagonistas de la historia.
