“Este año la actividad de los congresos en Valencia va a igualar a la del 2019”, señala Sylvia Andrés, directora gerente del Palacio de Congresos de Valencia, en una entrevista para Tourinews.
El Palacio de Congresos de Valencia, que fue creado en 1998, nació para acoger eventos profesionales y para ser un impulsor en las relaciones comerciales. En el año 2018, fue premiado con el galardón al Mejor Palacio de Congresos del Mundo por la Asociación Internacional de Palacios de Congresos (AIPC). Andrés destaca que el 2022 lo consideran “muy positivo” y que la previsión del 2023 “es estar bastante por encima de 2019, sobre todo, con un gran componente internacional”.
Pregunta (P): ¿Cuál es la situación del sector MICE en Valencia?
Respuesta (R): Recientemente, se celebró el Congreso Nacional de Ingeniera Hospitalaria, que es uno de los más grandes que hay a nivel nacional, y el Palacio de Congresos de Valencia estuvo a rebosar. Con respecto a 2022, lo vemos como un año muy positivo, con mucho ánimo y con muchas sonrisas porque venimos de lo que venimos. Los primeros meses del año aún fueron duros porque desgraciadamente la pandemia aún estaba con rebrotes importantes, pero desde el mes de marzo ha sido un no parar. Y en este otoño no tenemos días libres.
Foto: Palacio de Congresos de Valencia.
P: Con las perspectivas y la situación actual, ¿se podría decir que se ha recuperado el negocio después de la pandemia?
R: Sí, en el caso del Palacio de Congresos de Valencia se dan dos circunstancias. Por un lado, en enero y febrero, la actividad que teníamos prevista se desplazó a final de año. Además, nosotros en julio y agosto cerramos de una manera forzosa porque teníamos que cambiar las 2.000 butacas de los dos auditorios principales; había que hacerlo en verano, que es el momento con menos actividad, pero eso provocó que desde el 11 de julio hasta el 4 de septiembre cerrásemos las instalaciones. Aun así, la actividad va a ser prácticamente la misma que en 2019. El 2019 fue el mejor año de la historia del Palacio de Congresos de Valencia, que ya tiene 24 años de historia. Asimismo, en el último cuatrimestre —de septiembre a diciembre— vamos a tener un 7% más de actividad internacional. En muchos casos, al igual que en el turismo de ocio, donde ha habido mucho crecimiento es el nacional, sin embargo, en nuestro caso el internacional ya está superando los datos de 2019 en este último cuatrimestre.
P: ¿Cómo es la previsión de cara a los próximos años?
R: En el 2023 y 2024 tenemos unas expectativas muy positivas. La labor comercial que se ha hecho es tremenda, sobre todo, desde 2021. Nosotros en el 2022 ya llevamos presentadas un 33% más de candidaturas que en el año 2021. Hemos ganado 22 candidaturas para los años futuros, y la previsión de 2023 es estar bastante por encima de 2019 y, sobre todo, con un gran componente internacional. Todo esto lo digo con mucha prudencia, pero con contratos firmados y con depósitos pagados. Podíamos pensar que los dos años de pandemia iban a tener un efecto muy positivo en 2022 y 2023, y es lo que ha ocurrido; pero lo que nos da más optimismo es que en 2024 nuestras previsiones siguen corroborando que será un año espectacular. Esto nos llena de optimismo y se afronta con mucho ánimo.
Ahora los eventos son mucho más respetuosos con el medioambiente debido a que si hay más digitalización y menos papel de por medio"
P: ¿Ha cambiado en algo el perfil del cliente MICE?
R: Lo que ha venido muy bien, por encontrar elementos positivos en esta pandemia, es lo que respecta a la digitalización, que iba más ralentizada. Ahora los eventos son mucho más respetuosos con el medioambiente debido a que si hay más digitalización y menos papel de por medio. Y sí que se ve mucha concienciación por alinearnos con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. En el caso del Palacio de Congresos de Valencia es algo que tenemos en nuestro ADN desde hace muchos años, porque ya en 2008 cambiamos toda la cubierta del edificio por una de placas fotovoltaicas. Actualmente, está muy de moda, pero en ese momento no tanto. El 40% de nuestras inversiones siempre son en sostenibilidad. Ya no solo a nivel internacional sino a nivel nacional, dentro de los requisitos cuando te comparan con otras sedes, se le está dando gran importancia a la sostenibilidad. Nos llena de orgullo porque tiene que ver con nuestro planeta, con la huella que vamos a dejar y con el legado de nuestra actividad, que hasta ahora se veía un poco negativa por toda la huella de carbono que estaba dejando, ya que la gente enseguida pensaba en los viajes en avión gasta mucho. Estamos viendo que realmente nuestro cliente, cada vez más y cada vez a un ritmo muy acelerado, está concienciado en algo que debería ser un imperativo para todos nosotros.
Foto: Palacio de Congresos de Valencia.
P: Antes comentaba que en julio y agosto cerraron el Palacio de Congresos de Valencia para cambiar las 2.000 butacas de las dos salas porque era la temporada más apropiada. En ese sentido, ¿existe alguna época del año en la que se produzca un cuello de botella para los congresos, sobre todo, por la disponibilidad hotelera?
R: Dentro de los palacios de congresos los hay que son una combinación de auditorio y palacio y otros que son feria y palacio. Nosotros somos puramente palacio de congresos, es decir, nuestro negocio más importante son los congresos. Además, tenemos algo de actividad cultural y de reuniones corporativas, pero para nosotros el grueso, lo que nos hace vivir, es el número de congresos, y hablamos de unos 38 al año. Los meses de abril, mayo y junio son las épocas de mayor actividad, junto con septiembre, octubre y noviembre. Por lo tanto, el resto de los meses es cuando tienes las jornadas, las reuniones corporativas y algún espectáculo. En cambio, en la primera quincena de julio solemos tener aún congresos internacionales, pero en la segunda quincena y en el mes de agosto hay muy poca actividad o ninguna. Entonces, son los momentos donde nosotros aprovechamos para hacer trabajos de mantenimiento y obras. Nosotros teníamos la asignatura pendiente de cambiar todas nuestras butacas después de 24 años y se aprovechó para cerrar, lógicamente.
P: Comentó también que esperan un 7% más de congresistas internacionales, ¿tiene Valencia una ventaja competitiva respecto a los archipiélagos al no depender solo del transporte aéreo? ¿Hay congresistas que llegan por vía terrestre o lo hacen todos por vía aérea?
R: Valencia está muy bien comunicada. Es cierto que Baleares y Canarias también lo están, pero Valencia cuenta con conexiones por AVE—trenes de Alta Velocidad Española—, que ellos por motivos obvios no tienen. El congreso nacional usa mucho el AVE, cuya implantación supuso un antes y un después. Con respecto al internacional, es prácticamente todo por avión.
P: ¿El negocio de los congresos se limita solo al palacio y a su servicio, o se capilariza este negocio al resto de profesionales de la ciudad?
R: Voy a dar un dato muy importante. Nosotros somos en plantilla 21 personas, y en el Palacio puede haber 200 empleados. Nosotros nos apoyamos en aliados estratégicos, que son empresas generalmente locales, y lo que hacen es ayudarnos en ese diseño de eventos. Nosotros le damos la posibilidad al cliente de proporcionarle todo lo que tiene que ver con el congreso. Esto es algo que no lo hacemos solo nosotros, sino que lo hacemos con todas esas personas que van con uniforme de Palacio, pero son empresas que no están en la plantilla. Aunque, para nosotros forman parte de ella. Es un negocio que enriquece a toda la zona. En los propios alrededores del Palacio de Congresos sirven de ejemplo: hace 24 años no había nada alrededor, y ahora hay hoteles con una capacidad de 1.000 habitaciones a una distancia a pie. También, hay restaurantes en toda la avenida que están abiertos los 7 días de la semana. Esto da riqueza a toda la ciudad y a toda la provincia, principalmente.
