La cadena Universal Beach Hotels forma parte de la historia del boom turístico en Baleares. Nacida en 1963, cuando el empresario suizo Alfred Erhart construyó su primer establecimiento —aunque los orígenes de la empresa se remontan a 1947— ha experimentado un crecimiento sostenido a lo largo de los años que le ha llevado a alcanzar los 18 hoteles, todos ellos en Baleares, y una plantilla de 1.200 empleados que atiende anualmente a más de 100.000 huéspedes.
"Somos una empresa muy familiar, muy cercana”, explica su CEO, Yannik Erhart, quien en entrevista con Tourinews repasa aspectos como el relevo generacional, los planes para dar el salto fuera de Baleares o su estrategia de reposicionamiento.
Pregunta (P): Se podría decir que está recién aterrizado procedente de ITB, ¿cuáles son las principales tendencias detectadas en la feria berlinesa?
Respuesta (R): Junto al suizo, el alemán es nuestro mercado principal. La feria ITB es siempre muy importantes para nosotros, para mantener los contactos. Y este año tenemos un crecimiento de más del 20% en dichos mercados. En ellos se nota que las reservas son cada vez más anticipadas, porque la gente se aprovecha más de las ofertas early bird y porque se quieren asegurar las mejores habitaciones al mejor precio, porque en los años anteriores en mayo ya estaban llenos.
P: La situación geopolítica y económica no es la ideal, ¿ve nubarrones en el horizonte?
R: De momento es pronto para decirlo, pero obviamente la situación geopolítica preocupa. La tendencia al proteccionismo de los mercados supone un desafío.
P: Ha mencionado a los mercados suizo y alemán, ¿en qué otros están notando un mayor crecimiento?
R: El mercado nacional también es cada vez más importante para nosotros. Se concentra más en los meses de verano, pero sí hay una tendencia ascendente desde los últimos años.
P: Con el vuelo directo desde Nueva York, muchos han apuntado a un incremento de turistas estadounidenses, ¿han notado ustedes dicho cambio?
R: Comparado con otros mercados es un porcentaje muy pequeño, pero sí que hemos tenido crecimiento. Aunque hay que destacar que no llegan solo a través de los vuelos directos, sino que la mayoría hacen viajes por toda Europa y provienen desde París, Londres, Roma, etc. Notamos que se alojan, sobre todo, en hoteles boutique de lujo o cinco estrellas.
P: Usted ya forma parte de la tercera generación familiar en la empresa, ¿cómo es el proceso para integrar a la familia en el negocio?
R: No somos tantos como en otras, así que es más fácil. Nacimos como touroperador en Suiza, siendo mi abuelo el fundador, y fuimos creciendo como cadena hotelera. Fue un pionero del boom turístico de los 60 y, por eso, tenemos la suerte de tener casi todos los hoteles en primera línea de playa, en ubicaciones espectaculares. En los 90 entró mi padre, que gestiona el touroperador, pero no llegó a involucrarse tanto en la operativa de la hotelera. Yo llegué hace 10 años. Vine a Mallorca como director Comercial y, en 2020, cogí el mando como CEO de la cadena. Mi padre, mi mujer y yo gestionamos la toma de decisiones.
P: ¿Espera ceder el testigo a las siguientes generaciones?
R: Tengo tres hijos que todavía son muy pequeños, pero claro que me gustaría que en algún momento por lo menos uno pudiera tomar el mando.
P: En un entorno marcado por grandes multinacionales, ¿qué ventajas cree que les aporta mantenerse como empresa familiar?
R: Lo primero, la cultura. Somos una empresa muy familiar, muy cercana. Conozco muchísimos empleados personalmente gracias al contacto diario que tenemos y esto es algo que creo que se pierde cuanto más grande es la empresa. Por otra parte, la toma de decisiones va mucho más rápido. No hay un consejo de fondo o un departamento, sino que somo nosotros, como familia, quienes tomamos las decisiones y las llevamos adelante.
P: En 2023 dieron el salto fuera de Mallorca, ¿se plantean la expansión a nuevos destinos o prefieren “jugar” en terreno conocido?
R: Estamos concentrados en Baleares, la gran mayoría en Mallorca, pero siempre estamos mirando en las otras islas. En los últimos años hemos invertido mucho en la gestora de los hoteles, la profesionalización de la central de compras y en la digitalización para prepararnos y, en un futuro, poder gestionar hoteles en otras zonas. De momento, para el futuro cercano, no tenemos nada previsto fuera de Baleares.
P: ¿En qué otros destinos tendrían interés?
R: Como somos una cadena vacacional, diría que Canarias.
P: ¿Cuáles son los objetivos más inmediatos para Universal Beach Hotels?
R: Estamos en un proceso de transformación de la cadena. Estamos invirtiendo mucho en nuestros productos para reposicionarlos. Hemos convertido los de 3 en 4 estrellas, los de 4 o en 5 o aquellos que se caracterizaban por su buffet en establecimientos boutique con restaurantes de mucha calidad abiertos también para el público de la zona. Estamos en un período de cambio importante y nos concentramos, sobre todo, en nuestros proyectos de reforma y posicionamiento enfocado no solo en la categoría, sino en la gastronomía, las experiencias y el servicio.
P: Con ese reposicionamiento, ¿se busca elevar el tique medio?
R: Evidentemente, uno de los objetivos es prepararnos para el futuro y trabajar siendo más rentables. Pero siempre nos mantenemos en una relación calidad-precio muy buena. Nuestra filosofía desde los tiempos de mi abuelo es ofrecer vacaciones que sean accesibles, no de superlujo, sino dirigidas a la clase media.
Esta es la primera parte de la entrevista, próximamente se publicará la segunda en la que se trata la situación turística actual de Baleares.