Las lounge o salas VIP se han convertido en un aspecto fundamental que hace que los viajeros ejecutivos se decanten por una aerolínea u otra. Estos servicios añadidos se han convertido en un imprescindible para unos pasajeros que, a contracorriente del predominio ‘low cost’, no están dispuestos a renunciar a las comodidades durante las intensas esperas en los aeropuertos.
Así, tanto gestores aeroportuarios como aerolíneas invierten dinero y esfuerzo en contar con salas VIP con todo tipo de prestaciones que hagan las delicias de los clientes ‘business’ y los acumuladores de millas. Uno de ellos es Iberia, que cuenta con tres lounges de estas características en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, su hub:
- Sala VIP Iberia Llegadas T4: Terminal 4. Llegadas, Planta -1 (pasadas las puertas de salida del hall de llegadas).
- Iberia Premium Lounge Velázquez, ubicada en el edificio satélite de la T4 da servicio a los vuelos internacionales, entre los que se incluyen todos los de largo radio de Iberia (Puertas de embarque S).
- En el edificio Principal se encuentra la Sala VIP Iberia Dalí, para vuelos nacionales, europeos dentro del espacio Schengen y Puente Aéreo; esta sala se encuentra situada inmediatamente después de pasar el control de seguridad y muy próxima a la ubicación del Puente Aéreo (Puertas de embarque H,J,K,M).
Parece una apuesta suficiente, sin embargo, desde el pasado 30 de julio, la sala Dalí, una de las más utilizadas, permanece cerrada por remodelación para, según explican a Tourinews desde Iberia, conseguir más espacio para los clientes, mejorar la conectividad individual en los asientos, mejorar la oferta gastronómica y ofrecer una mayor variedad de entretenimiento.
Estas obras, que se espera que concluyan durante la segunda quincena de octubre, están generando molestias para muchos clientes que esperaban tomarse un respiro, asearse y esperar con paciencia su vuelo. Iberia invita a los usuarios a dirigirse al Centro de Negocios de Aena (con el mismo horario que la Sala Dalí), donde disponen de espacios y material audiovisual para la celebración de reuniones, presentaciones; cuenta con recepción, sala de prensa, TV, baños, conexión wifi y pantallas con información sobre los vuelos. Además, también dispone de variedad gastronómica, como pastelería, snacks salados, refrescos, vino, cerveza y cafetería.
Eso sí, esta no es una opción para aquellos que tienen relativa prisa o que no quieren volver a quitarse cinturón, reloj y zapatos para pasar nuevamente por los arcos de seguridad. Y es que está ubicado en el Centro de carga aérea del aeropuerto de Madrid-Barajas, es decir, fuera de la T4, obligando a los viajeros a repetir todo el proceso de acceso. Para solventar este último aspecto y dar una alternativa a los que no quieren desplazarse a este lugar y volver a someterse a los controles de seguridad, la aerolínea española ofrece un servicio de desayuno (6 a 11 horas) en el restaurante Pepito Grillo. A partir de esta hora Iberia entrega un vale por valor de 8 euros que permite a los usuarios tomar un snack en uno de los diferentes establecimientos colaboradores ubicados dentro de la terminal.
Un pasajero consultado por Tourinews se muestra decepcionado ante la solución provisional de la línea aérea: “Esta sala es la que utilizamos los pasajeros que llegamos de América y tenemos vuelos de conexión. Lo único que se les ocurre es redirigir a los clientes a los ‘baretos’ de la zona, que por cierto, gracias a Iberia están haciendo su agosto”. Esta misma fuente explica que un ejecutivo inglés que viajaba a Heathrow “no entendía la situación y estaba bastante molesto y desconcertado con la solución de Iberia”.
Lo que está claro es que por el momento los pasajeros tendrán que armarse de paciencia mientras se finalizan las obras de esta sala VIP que promete, pero que, por ahora, deja mucho que desear