Tal y como informó Tourinews, desde el pasado lunes 20 de abril, el Gobierno Federal Alemán permitió la apertura de sus tiendas de hasta 800 metros cuadrados, aunque los diferentes Landers o estados podían determinar el calendario de desconfinamiento.
Ahora, la Asociación Alemana de Agencias de Viajes (DRV) ha confirmado que estos establecimientos también están pudiendo reabrir sus puertas. Para ello, deben cumplir con los requisitos de higiene y tener las autorizaciones requeridas.
Llamada de atención a los políticos germanos
Norbert Fiebig, presidente de DRV, ha mostrado su inquietud sobre la planificación de una temporada de verano “diferente a los anteriores”. Ha esgrimido que necesitan algún tipo de “señal positiva” que indique que “será posible viajar de nuevo, eso sí, teniendo en cuenta las medidas de higiene y precaución adecuadas”.
El profesional turístico se ha mostrado especialmente molesto por las últimas declaraciones de algunos representantes políticos que han cancelado por completo sus vacaciones de verano o que han defendido públicamente que sólo será posible viajar dentro de las fronteras alemanas. “No necesitamos a nadie para dinamitar las vacaciones de verano. Estas declaraciones no son de ninguna manera útiles en este momento”, ha declarado Fiebig que también ha admitido que es necesario un debate específico y que tampoco se pueden lanzar cantos de sirena sobre las vacaciones de verano.
"Nos enfrentamos a una situación excepcional en todo el mundo y, por supuesto, todas las decisiones políticas deben centrarse en la salud humana", explica Fiebig. "Pero estoy convencido de que es posible viajar de una forma más segura e inteligente. Como industria, estamos muy contentos de participar en la planificación detallada para la implementación de conceptos de higiene y seguridad”, apuntó Fiebig, que añadió que tanto agencias, touroperadores, aerolíneas y hoteles están trabajando para hacer más seguros los viajes. Admite también que la apertura debe ser gradual y cuidadosa dependiendo de la disminución de infecciones, aclarando que un primer paso sería permitir los viajes domésticos para posteriormente abrirse a países europeos que han hecho frente a la pandemia de la forma más correcta. “La industria de viajes está a la espera para arrancar de nuevo lo más antes posible", concluye Fiebig.
Críticas a la inacción de la Unión Europea
Fiebig también ha criticado duramente a la inacción de las instituciones comunitarias europeas: “La situación de las empresas en la industria de viajes es más que amenazante, y no se toma ninguna decisión en la UE. El comisario de la UE, Reynders, retrasa la necesidad urgente de claridad sobre el esquema de bonos de reembolso. Eso es inaceptable”.
Y es que, a principios de abril, el Gobierno Alemán dio vía libre a los proveedores de viajes emitir bonos, en lugar de reembolsos, para salvaguardar su liquidez. Una medida que también han implementado Bélgica, Francia o España, pero que está siendo cuestionada por la Comisión Europea que tiene la última decisión a la hora de aceptar esta fórmula. “La toma de decisiones políticas en Bruselas no resiste los dramáticos procesos de desintegración económica de las agencias de viajes y los operadores turísticos”, esgrime Fiebig.
La solución de estos cupones es clave para una industria de viajes alemana que desde mediados de marzo ha registrado una caída en las ventas de 4.800 millones de euros. Y es que en esta situación, las compañías del sector turístico se encuentran en una difícil tesitura al no generar ventas y estar obligadas a reembolsar los pagos de viajes cancelados por coronavirus.