Este inicio de temporada alta en España está contando con numerosos vuelos conflictivos procedentes de Reino Unido. Desde el pasado mes de abril, la cuenta oficial de Controladores Aéreos en Twitter lleva denunciando numerosos altercados con múltiples pasajeros británicos ebrios en rutas, en su mayoría, hacia los aeropuertos de Alicante y Tenerife.
Es el caso de la última trifulca relatada por los controladores en un vuelo operado por Ryanair hacia el recinto de Alicante-Elche Miguel Hernández, en la que intervinieron hasta 30 pasajeros bajo los efectos del alcohol y ante la que el piloto solicitó presencia policial en la pista de aterrizaje a la llegada del avión.
La gravedad de la situación llevó al comandante a solicitar asistencia en el aterrizaje para realizarlo a la mayor brevedad posible. “Prioridad, recorte de maniobra en lo posible y se coordina la presencia de policía”, fueron las peticiones expresadas por el piloto de la aeronave a la torre de control alicantina, debido a los “problemas con una treintena de pasajeros ebrios”.
Pese a los intentos de Ryanair por frenar estos desagradables altercados en el aire, como la reciente prohibición de portar bebidas alcohólicas en el equipaje de mano en los vuelos desde Reino Unido hacia Alicante, Barcelona, Ibiza, Málaga, Mallorca y Tenerife Sur; las situaciones se siguen repitiendo. De hecho, tampoco han surtido efecto las peticiones que lleva realizando desde 2020 el sindicato de tripulantes de cabina Unite de ampliar las restricciones al consumo de alcohol y crear listas negras de pasajeros.