Tras la fuerte presión internacional, el Gobierno de Países Bajos ha decidido suspender temporalmente el conjunto de medidas mediante el que se eliminaban 40.000 vuelos en el aeropuerto de Ámsterdan/Schiphol.

El ministro de Infraestructuras y Administración del Agua en funciones, Mark Harbers, ha emitido una carta al Parlamento en la que anuncia que la reducción de operaciones de 500.000 a unos 460.000 no comenzará a aplicarse a partir del 31 de marzo de 2024, tal y como estaba previsto.

Toma la decisión debido a la “reacción internacional”, y es que se han pronunciado de forma contraria tanto la Comisión Europea como de los departamentos de Transportes de Estados Unidos y Canadá, que consideraban “la reducción de capacidad sería injusta, discriminatoria y anticompetitiva” e incluso amenazaron con la adopción de contramedidas.

Pese a que posponen la limitación, mantienen su intención de solucionar los problemas de ruido que afectan a los residentes en los alrededores del aeropuerto, pero esperarán a lograr el respaldo del Tribunal Supremo.

KLM lo celebra, desde la propia Schiphol lo lamentan


La aerolínea KLM, que tiene su principal hub en el Aeropuerto de Ámsterdam, ha celebrado la decisión, recalcando que “es un paso importante para evitar represalias y seguir volando a Estados Unidos”. Además, apoya a la recomendación de la Comisión Europea de llevar a cabo un proceso legal cuidadoso a la hora de aplicar limitaciones.

Por su parte, el gestor aeroportuario Royal Schiphol Group ha afirmado en un comunicado estar “decepcionado por los recientes acontecimientos”, incidiendo en que los residentes locales “se están llevando la peor parte”.