La industria turística de Alemania sigue en pie de guerra y ayer celebró su cuarta jornada de manifestaciones, siendo esta la que ha registrado un mayor seguimiento de todas, con más de un millar de participantes. Los organizadores hablan de una "campaña única que hará historia del turismo".
Agencias de viajes, OTAs, touroperadores, compañías de transporte y demás empresas que participan en la cadena de valor turística exigen una ayuda financiera para uno de los sectores más castigados por la crisis del coronavirus, y es que algunas empresas han perdido hasta el 90% de las ventas. La industria al completo se siente decepcionada por los políticos y exigen un paquete de rescate y ayudas no reembolsables.
En numerosos enclaves de Berlín, como la Puerta de Brandeburgo, frente al Ministerio Federal de Economía, en Wittenbergplatz y en Washingtonplatz se han producido concentraciones, ya que las autoridades solo permiten manifestaciones de un máximo de 100 participantes.
Entre las entidades que se han sumado a las manifestaciones se encuentran FTI Group, con representantes de FTI, TVG y un equipo de televisión de sonnenklar.TV; la Asociación de Ventas de Viaje por Internet (Verband Internet Reisevertrieb, VIR) y la cooperación de agencias de viajes TSS Group, encabezada por su presidente Manuel Molina.
Por su parte, compañías de autobuses y automóviles se movilizaron para ofrecer transporte desde diversos puntos de Alemania rumbo a Berlín.