Ryanair ha anunciado que cerrará algunas de sus bases aeroportuarias y que cancelará diferentes rutas, debido a la inmovilización de los Boeing 737 MAX, que llevan en tierra desde el pasado marzo tas los accidentes mortales de Indonesia y Etiopía.
La ‘low-cost’ realizó este anuncio en una ‘puesta al día’ celebrada en la mañana del martes, 16 de julio, con los inversores. Como consecuencia de esta medida, Ryanair espera transportar a cinco millones de pasajeros menos en 2020.
A este respecto, el director ejecutivo de la aerolínea, Michael O’Leary, indicó que se encuentra en conversaciones con los aeropuertos y sindicatos para decidir qué bases de “bajo rendimiento” o “deficitarias” cerrar. Los cierres se efectuarán a partir de noviembre de 2019, lo que afectará a las próximas temporadas de invierno y verano.
Lo cierto es que la ‘low-cost’ tenía previsto recibir 58 unidades nuevas del B737 MAX en verano de 2020. Ahora, dadas las circunstancias que rodean al aparato, espera recibir hasta 30 para finales de mayo de 2020. Se trata de una estimación que podría variar en función del destino del 737 MAX.
“Esto reducirá la tasa de crecimiento de Ryanair, en el verano de 2020, del 7% al 3%, y significa que el crecimiento del tráfico durante todo el año hasta marzo de 2021 se reducirá de 162 millones de pasajeros a aproximadamente 157 millones”, aseveró el director ejecutivo. En este sentido, Ryanair espera restablecer su crecimiento a niveles normales en el verano de 2021.
El regreso del 737 MAX
En la actualidad, Boeing está trabajando en la actualización del sistema antibloqueo MCAS, señalado como responsable de las catástrofes en las investigaciones preliminares de ambos siniestros. Posteriormente, el propio fabricante reconoció la implicación de este software.
Los reguladores de seguridad de vuelo de todo el mundo tendrán que aprobar esta modificación, lo cual no está previsto para antes de finales de año. De acuerdo con O’Leary, “Boeing espera que se presente un paquete de certificación a los reguladores en septiembre y que se vuelva a poner en servicio poco después".
Sin embargo, Ryanair está actuando con cierta “prudencia” considerando que esa “fecha se desplome algunos meses, posiblemente hasta diciembre”.
“Lavado” de imagen
Por otro lado, parece que Boeing ha seguido las sugerencias de Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, de cambiar de nombre al polémico 737 MAX. Y es que están circulando una serie de imágenes de este modelo de avión, con el logo de Ryanair, donde ha sido sustituido el nombre de MAX por el de 8200.
HI-Res Photos: The MAX name has been dropped from the high capacity version of the #737MAX8 that @Ryanair has on order. pic.twitter.com/3q5QBN0TTg
— Woodys Aeroimages (@AeroimagesChris) 15 de julio de 2019