Llevo varios días viendo en distintos medios, artículos y plataformas, especialmente dirigentes de determinadas empresas, los de arriba, que continúan con el discurso de que “salimos más fuertes” y me entran dudas de si verdaderamente forman parte de este mundo o se refieren a ellos en particular, porque la realidad es que esto no hay por dónde cogerlo. No hay más que analizar un poco lo que sucede a pie de calle para darse cuenta de que “no solo, no salimos más fuertes”, sino que además “salimos tocados y casi hundidos”.
En 2019, pasaron por España casi 84 millones de viajeros internacionales, con un gasto de 92.000 millones de euros. Solo en el mes de marzo de 2020, ha habido un descenso del 64% de turistas, a lo que habrá que sumarle abril, mayo, junio y julio por el momento. El turismo mundial cerró 2019 con 1,5 billones de viajes en todo el mundo, lo que supuso un alza anual del 4% (por encima del avance de la economía mundial) y el décimo año consecutivo de crecimiento, según los primeros datos presentados por la Organización Mundial del Turismo (OMT).
En enero de este año, la OMT preveía para 2020 cifras similares a las del año pasado y no esperaba cambios significativos en el ranking de los principales destinos turísticos mundiales, donde España ocupaba el segundo lugar, solo rebasada por Francia. La OMT esperaba que el turismo avanzase entre un 3% y un 4% en 2020 y se viese beneficiado por grandes acontecimientos deportivos y culturales, como los Juegos Olímpicos de Tokio o la Expo de Dubái, respectivamente. Dicho esto, y teniendo en cuenta que desde marzo de 2020 el mundo se paró, no hay que ser un gurú de las finanzas ni del Turismo para darse cuenta de que las cosas no van bien este 2020 y de que la recuperación de este desastre no es para el 2021, sino que quizás nos lleve otra década levantar cabeza.
Por otro lado, tal y como he leído también en este mismo medio (Tourinews):
'Los hoteles de lujo del Caribe (un alto porcentaje son empresas españolas) estudian exigir el pago por adelantado a los touroperadores británicos, después de que se produjeran impagos valorados en millones de dólares, por servicios ya prestados, por la crisis del COVID19. Según ha informado TravelMole, los hoteleros barajan esta opción debido a que algunos operadores turísticos de Reino Unido, como TUI UK & Ireland, Virgin Holidays y Dnata Travel Group, tienen los pagos correspondientes al primer trimestre del año pendientes. De hecho, algunos hoteles del Caribe podrían verse obligados a cerrar por estas deudas, tal y como puso de relieve el CEO de la Asociación de Hotelería y Turismo del Caribe (CHTA), Frank Comito.
"Ellos (los touroperadores) han tenido el dinero en efectivo en sus manos, pero han optado por no reembolsar ese dinero. Nos parece una práctica muy desafortunada", agregó, asegurando que el impago está "causando tremendas dificultades" para los hoteleros. A su vez, señaló que los hoteleros de Barbados lideran esta apuesta por convertir el pago anticipado en una condición de los contratos futuros'.
Todo esto me recuerda a ciertas elecciones nacionales políticas, cuando un grupo determinado saca malos resultados en las urnas e intenta hacernos creer que han sido buenas. Hasta que no nos demos cuenta y reconozcamos que realmente estamos jodidos no vamos a poder encaminar una solución.
Antes de salir del tema de los touroperadores, dejadme que os diga que no nos extrañe que, en unos meses, volvamos a ver una quiebra en este sentido, llamadme alarmista, pero lo que está claro es que un touroperador que tiene dinero por adelantado de los hoteleros, que vive única y exclusivamente de la industria turística en todas sus vertientes, hoteleras, marítimas y aéreas, sin ingresos en los últimos meses y que no es capaz de reembolsar el dinero a los propios hoteleros, me suena a desastre y ese desastre, si sucede, arrastrará a mucha gente incluso marcas consolidadas.
Por otro lado, mientras escribo este artículo, me llega la noticia, triste noticia, de que una cadena hotelera en República Dominicana desalojó a gran parte de su personal de las instalaciones del complejo, supuestamente, con gases lacrimógenos, entre otras medidas de presión, por la falta de capacidad de gestión de sus directivos con sus empleados, a la hora de pactar nuevas medidas laborales mientras dure el virus. En favor de la cadena hotelera, quiero decir que estoy convencido de que la marca en sí no tiene nada que ver en este tipo de situaciones, pero sí y mucho su director general, máximos responsables del complejo, directora de RRHH y los jefes directos de estos en operación. Este es un ejemplo más de que no siempre el que está arriba o tiene un alto cargo en operación hotelera se le puede considerar líder o está capacitado para gestionar y empatizar con las personas y entiendo que la propia marca tomará medidas al respecto por determinadas acciones, en lo que yo particularmente creo y quiero insistir en ello, no comulgan. República Dominicana es un destino turístico de lo mejor del mercado a nivel mundial y si como máximos responsables en dicha industria hotelera de ese país, no somos capaces de entender su estilo de vida, al día y la necesidad extrema que tienen los empleados locales de trabajar por un ridículo sueldo, todo sea dicho, que dios los coja confesados a todos, los de un bando y los del otro.
También en Cuba, donde un alto porcentaje de las cadenas hoteleras que son españolas “okupas” y digo “okupas” porque no son propietarias de los hoteles sino meros gestores, las contrataciones de chefs extranjeros, por ejemplo, se ha reducido casi al 100% hasta el mes de diciembre y casi el 100% de esos chefs son también españoles. A partir de diciembre, volverán a contar con ellos, pero con aviso a navegantes, sueldos bastante inferiores a los de años atrás.
Volviendo a casa, más noticias: “El Gobierno Escocés comunicó el día 8 de julio, la lista de países que considera seguros para establecer puentes aéreos. En ella se incluyen 57 de los 59 que aparecían en la lista inglesa, destacando dos ausencias: España y Serbia”. Ayer 21 de julio Escocia ha rectificado y ha incluido a España entre los destinos seguros
“En la industria de cruceros, el coronavirus ha herido de muerte a Pullmantur Cruceros, compañía española cuyo 51% pertenece a Cruises Investment Holding y el 49% restante a Royal Caribbean. La naviera se ha declarado en concurso de acreedores ante las autoridades españolas con el fin de acometer una reorganización.”
“Héctor Gómez, director general del Instituto de Turismo de España (Turespaña), en plena crisis presenta su cese, que es aprobado el pasado viernes 22 de marzo por el Consejo de Ministros” creo que, porque se quiere dedicar a la política activa, vamos que les importan un pepino lo que pase con el Turismo, ellos van a lo suyo.
Y si nos metemos con los sellos o certificados fantasma de libres de covid, ya apaga y vámonos.
Podría seguir con más titulares, basta con hacer un poco de zapping en la red y en plataformas y digitales serios y nos daremos cuenta que “no salimos más fuertes”. Con cada uno por su lado intentando salvarse solo, como pollos sin cabeza abriendo y cerrando hoteles, con casi 30.000 muertos por el virus, la mayor tasa de paro de la historia donde “la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en un informe, ha alertado de que uno de cada seis jóvenes en el mundo ha perdido su empleo a consecuencia de la epidemia de Covid-19 y muchos jóvenes tienen contratos temporales y extremadamente precarios en algunos de los sectores más afectados por la crisis, como la hostelería y el turismo. Por ello, se entiende de que cuando acaben los ERTE y las empresas comiencen a cerrar o a despedir, “habrá una nueva caída” del empleo juvenil y quizás de nuevo una generación perdida.”
No sé… seguro que más de uno le verá cosas positivas a todo este desastre humanitario y del cual aún me temo que hemos visto poco, pero vamos, para atrás ya, ni para coger impulso.
Víctor Rocha López es Corporate Chef F&B Culinary trainer. Autor del libro 'El humo que todo lo quema'.