La reforma laboral de 2022 introdujo significativos cambios en los contratos de trabajo en España, afectando especialmente a la hostelería. Entre sus novedades más relevantes, eliminó los contratos por obra y servicio, estableciendo el contrato indefinido como la norma general. En este contexto, el contrato fijo discontinuo ha ganado protagonismo, consolidándose como una figura clave en sectores con una alta estacionalidad, como la hostelería. Según datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), más de un tercio de los contratos indefinidos firmados en 2023 fueron fijos discontinuos.
¿Qué es un contrato fijo discontinuo?
El contrato fijo discontinuo está diseñado para empleos que no requieren continuidad durante todo el año, pero sí en periodos recurrentes y predecibles. Se caracteriza por lo siguiente:
- Indefinido, no temporal: Aunque el trabajador no trabaje todo el año, el contrato no tiene fecha de finalización. Durante los periodos de inactividad, no recibe salario ni cotiza a la Seguridad Social.
- Obligación de llamamiento: La empresa debe notificar al trabajador cuando se reactive la actividad, asegurando su reincorporación.
- Jornada parcial o completa: Es adaptable tanto a jornadas completas como parciales. Por ejemplo, puede aplicarse a un camarero que trabaje únicamente durante la temporada de verano.
- Relación laboral permanente: El trabajador forma parte de la plantilla fija de la empresa, lo que evita procesos repetitivos de selección y formación.
Ventajas para bares y restaurantes
Implementar contratos fijos discontinuos en la hostelería presenta beneficios tanto para los empleadores como para los trabajadores:
- Bonificaciones fiscales: Las empresas pueden acceder a incentivos por contratar bajo esta modalidad.
- Adaptabilidad: Permite ajustar la plantilla según las necesidades estacionales o eventuales.
- Estabilidad en el equipo: Al mantener un personal fijo, se reduce la rotación y mejora la calidad del servicio.
- Ahorro en reclutamiento: Evita los costos asociados a procesos constantes de selección y formación de nuevos empleados.
Dudas frecuentes
¿En qué se diferencia un contrato fijo discontinuo de uno temporal?
La principal diferencia radica en la relación laboral. En el contrato fijo discontinuo, esta es indefinida, mientras que el contrato temporal tiene una fecha clara de finalización. Desde la reforma laboral, los contratos temporales solo son posibles en casos específicos como:
- Sustituciones (e.g., bajas por maternidad).
- Incrementos puntuales de producción.
¿Es necesario firmar un nuevo contrato en cada campaña?
No. El contrato fijo discontinuo es único y permanece vigente, aunque se suspenda durante los periodos de inactividad. La reactivación se realiza mediante un llamamiento por escrito u otro medio comprobable.
¿Existen límites de espera entre campañas?
No hay un plazo concreto establecido por la normativa. Sin embargo, las empresas deben justificar sus decisiones en función de sus necesidades operativas.
Derechos y responsabilidades del trabajador
El personal contratado bajo esta modalidad tiene los mismos derechos que cualquier empleado indefinido, incluyendo salario, cotización y acceso a beneficios durante los periodos activos. Además:
- Si la empresa no realiza el llamamiento, el trabajador puede entender que ha sido despedido y presentar una reclamación en un plazo de 20 días hábiles.
- Durante los periodos inactivos, el contrato queda en pausa, pero sigue vigente.
Usos del contrato fijo discontinuo en la hostelería
Este contrato es ideal para actividades que requieran flexibilidad laboral, como:
- Trabajos estacionales: Por ejemplo, en hoteles con alta demanda en verano o fiestas específicas.
- Actividades intermitentes no estacionales: Donde las necesidades de personal son recurrentes, pero no predecibles en fechas exactas.
- Contratas y servicios: Como la prestación de servicios mediante empresas externas o la ejecución de eventos.
En algunos casos, los convenios colectivos permiten adaptar esta figura a jornadas parciales para cubrir eventos puntuales, aumentando la flexibilidad.
Consideraciones legales
Es fundamental revisar los convenios colectivos de la provincia o comunidad autónoma, ya que pueden incluir especificaciones sobre la aplicación de esta modalidad contractual.
Para más detalles, puedes consultar la normativa oficial en el BOE.
El contrato fijo discontinuo se ha convertido en una herramienta clave para la hostelería, permitiendo a los negocios adaptarse a la estacionalidad y garantizar la estabilidad laboral de sus empleados. Su correcta implementación puede ser una solución efectiva para equilibrar la flexibilidad empresarial y la seguridad del trabajador.
*Jesús Menéndez López es CEO de Hotel Mystery Guest. Cuenta con MBA en Gerencia y Dirección hotelera por la Universidad Politécnica de Madrid y ha realizado estudios en UCC (University College Cork, Irlanda).