Opinión
TRANSPORT REVOLUTION: Demand Responsive Transport (DRT) o el Transporte responsable de la demanda (TRD)
Dentro de poco las ciudades estarán completamente peatonalizadas, el transporte de proximidad hará que dejemos el coche en casa y compartamos vehículos para ir al trabajo
En un mundo cambiante en el que dentro de poco las ciudades estarán completamente peatonalizadas, el transporte de proximidad hará que dejemos el coche en casa y compartamos vehículos para ir al trabajo. Gracias a la tecnología y la digitalización y fuera de modelos como Uber y Cabify, la movilidad se está transformando.
Este tipo de movilidad en el transporte a demanda (DRT, por sus siglas en inglés), gracias a la tecnología, ofrece una opción real de movimientos.
Aparte de buscar rutas por Google o utilizar moovit, para movernos como peatones con opciones de tiempo real de conexiones de transporte público, y gracias al uso de algoritmos de inteligencia artificial (IA), ya se pueden adaptar las necesidades de traslado de distintos usuarios, creando rutas adaptadas a las necesidades de cada uno programando recogidas en tiempo real con los conductores de los vehículos, en el camino hacia la ruta de destino.
Hace ya muchos años, recuerdo en Marruecos que viajando en un Mercedes destartalado, el conductor iba parando y recogiendo a posibles clientes improvisando paradas en la ruta de Tánger a Casablanca, con pago en efectivo y con alta rotación de clientes en todo el viaje.
¡Hoy en día con la inteligencia artificial se pueden crear rutas que satisfagan a todos los viajeros y donde las recogidas se realicen en tiempo real!
Con parámetros de voz que digan: ¡Antonio! En un kilómetro y medio de camino a Plaza Castilla, recogemos a Sara, en la dirección X, tienes espacio para parar sin restricciones y llevaremos a la viajera hasta el punto final de destino.
Como siempre, falta una normativa y habrá muchos detractores, por parte sobre todo de los conductores de taxis y de VTC, y compañías que dirán que los conductores alternativos no son seguros.
¿Y son seguros los coches sin conductor que ya existen en muchas ciudades del mundo? Y es que ya hay compañías de transporte que se han dado cuenta de que la evolución natural del mismo va a cambiar a los conductores de vehículos privados y el discrecional, se están creando gestores informáticos de flotas, en los que los vehículos se rigen por una programación de inteligencia artificial.
La movilidad será más dinámica, flexible, sostenible, económica y se podrá adaptar a una amplia variedad de colectivos, como colegios, trabajadores o pasajeros de una misma zona industrial o parque empresarial, o simplemente que tengan el mismo punto de destino.
¿Cuántos autobuses desde los pueblos de Toledo y Ciudad Real llegaban a Madrid durante el boom de la construcción?. Es el mismo modelo, pero adaptado a la digitalización para establecer ahorros de coste y modelos de ciudades sostenibles a nivel ambiental.
El misoneísmo como siempre, la resistencia al cambio y el cambio de cultura del coche particular al vehículo compartido es un hándicap, pero no es insalvable.
Las aplicaciones de la inteligencia artificial crean un sistema flexible que es muy eficiente en zonas de densidad baja para atender la demanda en tiempo real. Plataformas tecnológicas de transporte colectivo a demanda como shotl —que se anuncia como “Asientos completos, calles más despejadas”—. Shotl On-demand Buses es una plataforma de movilidad que une a varios pasajeros que se dirigen en la misma dirección con una flota de furgonetas y minibuses en movimiento.
Aplicaciones que funcionan interconectadas: App del conductor, módulo de gestión y App del usuario. Se puede usar en ciudades, en polígonos, en zonas empresariales.
El primer servicio urbano de shotl se aplicó en Lisboa, la capital de Portugal, con una población de más de medio millón de habitantes, como una operación sostenible en un entorno completamente urbano.
Barcelona ha comenzado con shotl de la mano de la familia Martret, creadores de experiencias en transporte privado con conductor en Drivania, ampliando su operación al DRT en Barcelona. La primera zona escogida abarca los barrios de Montbau y Vall d’Hebron.
Otras empresas como celering ofrecen el concepto de shuttle dinámico o lanzadera digital. La aplicación proporciona tecnología y recursos para ayudar a las ciudades a probar e implementar nuevos servicios de autobuses que respondan a la demanda.
El sistema ayuda a los operadores de transporte y a las ciudades a hacer un mejor uso de su sistema de autobuses mediante la sustitución de rutas con pocos pasajeros por servicios de enlace bajo demanda. El futuro avanzará gracias a las sinergias entre municipios y empresas, creando planificaciones de movilidad real y con rutas rentables para todos. Happy travellers.
Existirán dos tipos de viajes: los de lujo, con empresas como Grand Class, o los económicos, con alternativas de transporte compartido o de servicios limitados. Para estos últimos, la App del pasajero puede reservar un viaje en tiempo real.
Los usuarios con la aplicación en sus teléfonos inteligentes pueden enviar una solicitud de viaje en cuestión de segundos. Después de seleccionar el número de pasajeros y escribir las direcciones de origen y destino, la aplicación proporciona una hora precisa de recogida y la hora estimada de llegada. Para que el servicio sea más correcto, se informa a los pasajeros con indicaciones para caminar hacia un punto de recogida y desde el punto de entrega hasta su destino final.
La App del conductor, sigue la ruta y guía al minibús para recoger a los pasajeros en un punto de recogida y los gestiona hasta el punto final de entrega.
Todas las rutas son totalmente dinámicas y se ajustan en tiempo real, en función del tráfico y la demanda. Los algoritmos están hechos para garantizar la máxima puntualidad en cada viaje. La aplicación proporciona un transporte compartido eficaz, por lo que todos los viajes se comparten con otros pasajeros que se dirigen a un destino similar o con direcciones comunes.
El módulo de gestión integral administra todos los viajes
Los gestores de operación y flota tienen acceso total a una consola central para supervisar las fluctuaciones de la demanda, administrar la disponibilidad de vehículos y verificar el estado de cada viaje. El módulo de gestión permite a los gestores agregar o quitar nuevas paradas virtuales, cambiar el tamaño del área operativa de servicio o abrir y cerrar la disponibilidad de las calles.
El objetivo es optimizar las rutas de cada vehículo y maximizar su factor de carga para liberar la ciudad del tráfico transportando a varias personas a la vez.
El transporte del futuro ha de ser necesariamente más rápido, más económico, más sostenible y, en definitiva, más eficiente. Para ello, la tecnología juega un papel fundamental y más concretamente la tecnología DRT no dejará de crecer.
En el mundo rural, la alternativa de la IA adaptada al DRT abre un mundo de posibilidades más allá de llamar al taxista del pueblo para ir a la capital o a un pueblo cercano para hacer la compra o sacar dinero de un cajero.
La aplicación de la tecnología de transporte adaptada a las zonas rurales aporta un impacto relevante, pues incrementa de forma notable la eficiencia en el sistema, no solo en términos económicos y de ahorro de tiempo, sino de ahorro en emisiones contaminantes.
En un país que ha caído en la tristeza y en la falta de comunicación durante los largos periodos de confinamiento durante la pandemia, la gente necesita comunicarse; y para viajar en trayectos, largos y cortos ya existe una nueva oportunidad.
Yo conozco a mucha gente que conoció a su media naranja en un viaje de BlaBlaCar, e incluso viajeros que tenían media naranja en cada destino como los marineros.
Todo se transforma y cada vez más deprisa. Naranjas o limones, pero todo más sostenible y protegiendo cada vez más al planeta.
Demand Responsive Transport – Transporte bajo Demanda
Viajar y transportarse compartiendo sueños.
*Jesús Menéndez López es CEO de Hotel Mystery Guest. Cuenta con MBA en Gerencia y Dirección hotelera por la Universidad Politécnica de Madrid y ha realizado estudios en UCC (University College Cork, Irlanda).
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