¿Por qué el uniforme del Tripulante de Cabina de Pasajeros (TCP) se degrada y se devalúa cada vez más?
Siendo, como deberíamos ser, los garantes de la seguridad de los pasajeros mientras estos estén a bordo, el uniforme, como herramienta y escudo que es, debería reflejar de manera muy clara su mensaje de autoridad y garante de seguridad.
Los TCP llevábamos gorra, galones y botones metálicos no muy diferentes del de los pilotos, de manera que, cuando había cualquier conflicto —que los había y muchos—, bastaba con vestir el uniforme completo y abotonado y dejar que el mensaje de autoridad hiciese su magia.
Hoy vemos asépticas camisas y calzado deportivo cubierto por una americana de las de rebajas de moda de rebaño. Así el mensaje no llega. Hoy día cuesta diferenciar al TCP de entre los pasajeros del avión porque los uniformes ya no lo son. Son ropa de trabajo sin mensaje alguno.
*Iván Torregrosa Pihlman es profesional de la aviación