Opinión

Todo el mundo viaja con amigos, pero no todo el mundo tiene 47 cromosomas

Personas responsables, generosas, pacientes y sin prejuicios son clave para avanzar en la inclusión en los viajes

Mi hermana tiene 26 años. Hace una semana se fue de viaje. Con amigos. A Ginebra (Suiza). De sábado a lunes, en el puente de mayo. A ver a una amiga que está viviendo allí. Vale… ¿y? Todo el mundo se va de viaje con amigos. Pero no todo el mundo tiene 47 cromosomas.

Y esto es posible gracias a muchas personas y muchas circunstancias a lo largo de la vida de mi hermana, pero ahora quiero fijarme en los dos amigos con los que se fue y en la amiga que les recibió allí.

Personas responsables: no todo el mundo se querría hacer responsable de una persona con discapacidad en un viaje internacional. Que para pasarlo bien un ratito todos estamos disponibles, pero a veces hay que lidiar con cosas “menos bonitas”.
 

El grupo tomando el avión | Foto Cedida


Personas generosas: cuando me preguntaron si me parecía bien que se fuera con ellos de viaje, mi respuesta fue que yo estaba feliz, pero que, si yo fuera ellos, no llevaría a mi hermana, ya que les condicionaría el viaje en cierta manera… ¡Les dio absolutamente igual! Pensaron antes en mi hermana que en disfrutar por su cuenta del viaje.

Personas pacientes: yo adoro a mi hermana y por ella lo daría todo, pero… ¡A veces me desespera! Hay que tener paciencia con ella para según qué cosas y en qué momentos. Y en un viaje así, habrá muchas ocasiones para ser pacientes.

Personas sin prejuicios: se quitan los prejuicios y son AMIGOS de una persona con discapacidad. Este es el mensaje de WhatsApp que recibí de uno de sus amigos con los que se fue: “No debes dar las gracias, es nuestra amiga y a mí me da la vida cada vez que quedo con tu hermana. Ginebra promete.” Sí, lagrimita en el ojo cuando lo recibí…
 

El viaje a Ginebra (Suiza) fue todo un éxito | Foto Cedida


Personas responsables, generosas, pacientes y sin prejuicios… ¡Siempre en mi equipo!

Y esto me llevó a pensar que todas estas cualidades se nos olvidan muchas veces en el ámbito laboral, que buscamos muchas otras que pueden ser muy importantes y necesarias en los trabajos, pero estoy convencido de que, para ser un gran profesional, antes hay que ser una gran persona y eso no está relacionado con productividad, cifras de ventas, organización, etc. el mundo necesita más personas que sean buena gente, ¡el mundo necesita más personas como los amigos de mi hermana! 

 

*Diego Aparicio es responsable de International Business Development en Onyx Solar (BIPV)

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