Las pantallas divisorias se han convertido en una de las soluciones más destacadas para respetar el distanciamiento social, una vez se produzca la desescalada y la vuelta progresiva a la "normalidad". De hecho la empresa italiana NuovaNeon ha propuesto este tipo de medidas para playas y restaurantes. 

Sin embargo, según reseña The Irish Sun, la instalación de estas mamparas transparentes también se ha planteado para los aviones. La iniciativa, esta vez, ha sido liderada por la firma italiana de mobiliario aeronáutico Aviointeriors, popular por haber diseñado asientos para viajar prácticamente de pie en avión. 

En concreto, estas pantallas se instalarían en los laterales del asiento, de tal forma que la cabeza y el pecho del pasajero quedarían recubiertos y protegidos en el caso de que el compañero de asiento estornudara o tosiera. La mampara, denominada Glassafe, es de material transparente para facilitar la comunicación. 

De esta manera, tal y como enfatiza la empresa encargada de su diseño, se minimizarían los riesgos de contagio de COVID-19. En este sentido, Aviointeriors manifestó que, pese a que el producto está listo para su producción, es poco probable que se pueda utilizar en breve, ya que antes debe superar los requisitos de seguridad. 

Algunas voces defienden que los virus son capaces de vivir hasta tres días en estas superficies de plástico, por lo que la limpieza de las mamparas después de cada vuelo tendría que ser exhaustiva. 

Otras medidas

Otra alternativa para evitar los contagios a bordo, es que el asiento del medio cambie de dirección; que mire hacia atrás mientras que los de los lados miran hacia adelante, respetando su disposición habitual. Se trata de un diseño en forma de 'S', no obstante presenta el problema de que el pasajero del medio se quedaría mirando hacia los pasajeros de los laterales, de la fila posterior. 

También, se han propuesto 'paneles de privacidad', una especie de cortinas desplegables entre los asientos, que permiten compartimentar cada plaza. 

Asientos vacíos

Entre las opciones más extendidas, figura la de dejar los asientos del medio vacíos para respetar las recomendaciones de distanciamiento social. Es una alternativa que, por ejemplo, easyJet ha manifestado tener en cuenta una vez reanude su actividad. Ryanair, por su parte, se ha mostrado contrario a esta medida y es más partidario de reforzar los controles de temperatura.

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