Mediante un proyecto de ley, Argentina ha reconocido al montañismo como actividad deportiva, de interés cultural y socio-recreativa, con influencias positivas tanto en el ámbito de la exploración científica, como en la educación o medio ambiente. Además, la práctica ha sido reconocida como un potencial revulsivo turístico.  

Según ha informado CatamarcActual, el presidente de la Cámara de los Diputados, Fernando Jalil, comentó al respecto que el montañismo “históricamente” ha sido considerado como una actividad “sin fines de lucro”, sin embargo, teniendo en cuenta el entorno natural de Argentina, esta práctica puede elevarse a la categoría de deporte y así "fomentar el turismo y las economías regionales" por medio de la "realización de diversos eventos”.

Al mismo tiempo, Jalil concretó que dentro del montañismo se incluyen actividades como el senderismo, trekking o escalada. Además de que el proyecto de ley aprobado permite el acceso de los practicantes de esta actividad a entornos naturales, así como el tránsito en terrenos “abiertos de propiedad privada”.

Para poder realizar montañismo, aquellas personas que no formen parte de una organización deberán solicitar una acreditación al Organismo de Aplicación. A su vez, la ley diferencia entre las actividades practicadas de forma altruista y aquellas que generan rendimientos económicos; estas últimas se enmarcarían en el sector turístico y por tanto serían reguladas por las normas turísticas. 

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