La prohibición de nuevas plazas de alquiler turístico en edificios plurifamiliares en Baleares se hará realidad el viernes. El Govern tiene previsto ese día aprobar el borrador de la nueva ley que regulará esta modalidad de alojamiento. 

A pesar de que esta medida lleva anunciada desde octubre, el borrador, al que ha tenido acceso Diario de Mallorca, ha despertado revuelo entre diferentes actores turísticos. Y es que, finalmente, el veto no afectará a viviendas adosadas, pareadas, ni a las habitaciones alquiladas en domicilios que constituyan la residencia habitual del anfitrión.

Asimismo, tras la petición de la patronal del alquiler vacacional, Habtur, se desbloquearán para su comercialización 90.000 plazas turísticas, lo que ha provocado el descontento de hoteleros y sindicatos. Estas se encontraban dadas de baja por su situación irregular y no se podían reutilizar bajo la anterior ley turística, ahora, con la nueva norma, serán reactivadas.

Adicionalmente, la nueva norma creará dos bolsas temporales de plazas turísticas por isla —una para hoteles y otra para alquiler turístico—, que estarán vigentes hasta que cada Consell insular determine la capacidad de carga turística de cada isla. Las bolsas se alimentarán de las plazas que se den de baja voluntariamente.

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