Los cruceros podrían volver a navegar por aguas estadounidenses en noviembre. Al menos esta es la pretensión del Gobierno de Estados Unidos, que está trabajando para echar abajo la normativa de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) que no permite operar a las compañías debido al coronavirus.
Mientras que el doctor y director del CDC, Robert R. Redfield, aboga por prolongar la prohibición de navegar hasta el 15 de febrero de 2021, el equipo de trabajo de la Casa Blanca quiere que los cruceros retomen su actividad a partir del 31 de octubre, así lo recoge el New York Times.
De acuerdo con al citado diario, la decisión de la “Administración Trump” podría estar muy ligada a las próximas elecciones presidenciales que se celebrarán el martes 3 de noviembre. Apuntan que los republicanos están intentando ganar el voto de Florida, un estado en el que la industria de los cruceros tiene gran influencia política. También tienen un gran peso económico para todo el país, puesto que genera 53 mil millones de dólares al año, según la Asociación Internacional de Líneas de Crucero (CLIA, por sus siglas en inglés). No obstante, Brian Morgenstern, secretario de prensa adjunto de la Casa Blanca, ha querido matizar que la decisión del Gobierno no está políticamente motivada.