La región de Esquel (Chubut), al noroeste de Argentina, se ha posicionado como un importante punto de partida para los miles de turistas que acuden hasta la región para avistar aves en el bosque andino. 

En el entorno natural de la Patagonia, que cuenta con más de 300 especies de aves, los turistas pueden adentrarse solos o con guías y reciben libros especializados para catalogar e identificar las aves. Las más vistas son el pájaro carpintero, el macá, el pato biguá y el más codiciado el cóndor de los Andes. 

Según Francisco González Taboas, miembro de la Organización Aves Argentinas, el año pasado llegaron a la nación sudamericana 50.000 extranjeros para practicar la actividad. De ellas, 35.000 acuden cada año a la comarca andina. Esquel cuenta con infraestructuras turísticas, hoteles y cabañas, para todos los niveles adquisitivos. Además, su oferta gastronómica es de gran prestigio. 

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